Definición de Revolución de Mayo Argentina españa, américa y resumen de sucesos

Mercedes Roch
Lic. en Historia

En mayo de 1810, los rioplatenses conocieron la noticia de la disolución de la Junta Central de Sevilla tras la ocupación francesa de la ciudad. Así, ante la situación de vacío de poder, el pueblo se reunió en la Plaza de la Victoria (actual Plaza de Mayo) y reclamó la convocatoria a un Cabildo Abierto.

Luego de días de reuniones y discusiones acaloradas, el 25 de mayo de 1810, desafiando a las autoridades virreinales, se conformó un gobierno compuesto en su mayoría por criollos. Este gesto revolucionario constituyó el inicio de la ruptura con el régimen colonial impuesto por España durante siglos.

La situación en España

En 1808, Napoleón había invadido España con el objetivo de crear su propio imperio en toda Europa. Al obtener el triunfo, obligó a abdicar al rey en funciones, Carlos IV, y a su hijo Fernando VII quien, a su vez, fue apresado. A la cabeza de la monarquía se nombró a José Bonaparte, hermano de Napoleón.

Si bien los habitantes del reino se levantaron en armas, fueron fuertemente reprimidos por las tropas francesas. Rápidamente comenzó a surgir un sentimiento de lealtad al rey cautivo. Basándose en el principio de “retroversión de la soberanía” por el cual, ante la ausencia del soberano, el pueblo reasume su soberanía y obtiene la capacidad de gobernar, los pueblos se unieron para rechazar las abdicaciones. De esta forma, se formaron juntas de gobierno en España que juraron fidelidad a Fernando VII.

Posteriormente, se creó una única Junta Central en Sevilla cuyo objetivo era constituirse en órgano de gobierno mientras el rey estuviera preso.

La situación en América

En América también se rechazaron las abdicaciones. Sin embargo, no se formaron juntas de gobierno porque las circunstancias eran diferentes a las de la metrópoli, principalmente no habían invasiones ni levantamientos. Por esa razón, las autoridades reales continuaron ocupando sus cargos y se terminó reconociendo la autoridad de la Junta de Sevilla.

En 1809, la Junta llamó a los americanos a enviar vocales para reunirse en las cortes de Cádiz. En ellas se decidiría el futuro del territorio. A pesar de haberse sentido ofendidos por haber sido invitados como miembros de las colonias y no como parte del propio reino, los americanos acataron la orden y enviaron sus representantes a Cádiz.

Paralelamente, Napoleón continuó avanzando sobre el territorio español hasta que, en enero de 1810, finalmente cayó la Junta Central de Sevilla.

Resumen de los sucesos de mayo

El Cabildo Abierto era un recurso que tenían los habitantes de la colonia para reunirse en caso de situaciones de urgencia. De esta forma, al enterarse de la caída de la Junta Central de Sevilla, los rioplatenses convocaron a uno para el 22 de mayo de 1810.

A la reunión fueron invitados 450 vecinos, de los cuales asistieron 250. En la misma se enfrentaron dos posturas principales: quienes buscaban la destitución del virrey Cisneros y quienes abogaban por que siguiera gobernando. Si bien se votó por la primera opción, el 24 de mayo, se conformó una junta de gobierno que fue presidida por el propio Cisneros. Esta situación generó revuelo en los patriotas.

Como consecuencia, en la mañana del 25 de mayo, el pueblo volvió a reunirse en la Plaza de la Victoria para exigir la renuncia de Cisneros y la conformación de una nueva junta de gobierno. Lo lograron: ese mismo día se formó el primer gobierno patrio, cuyo presidente fue Cornelio Saavedra, los secretarios fueron Juan José Paso y Mariano Moreno, y los vocales fueron Manuel Belgrano, Manuel Alberti, Juan José Castelli, Miguel de Azcuénaga, Juan Larrea y Domingo Matheu.

Si bien se juró fidelidad al rey Fernando VII, se reclamó soberanía sobre un territorio que, como colonia, nunca podría haber tenido el poder soberano. Asimismo, siete de los nueve miembros de la primera junta eran criollos, lo cual violaba las disposiciones de las reformas borbónicas. Así, el 25 de mayo de 1810, no emergió la nación argentina ni mucho menos, pero sí empezaron a configurarse nuevas relaciones de poder y se modificaron las fuerzas sociales.

Es de destacar que, no solo los criollos se alzaron para comenzar la lucha por la independencia. También participaron activamente mujeres, esclavos y sectores populares. Sin ellos no hubiera sido posible la revolución ya que su rol fue fundamental en la formación de nuevos liderazgos y en la derrota del enemigo en las guerras independentistas que continuarían a la revolución.


Referencias bibliográficas

Fradkin, Raúl, “¿Qué tuvo de revolucionaria la revolución de independencia?” en Nuevo Topo. Revista de historia y pensamiento crítico, N° 5, Buenos Aires, 2008, pp. 15-43.

Goldman, Noemí, “Buenos Aires, 1810: la revolución, el dilema de la legitimidad y de las...”, en Dossier: “Independencias Americanas”, Historia y Política (Madrid), N° 24, 2010.

Halperín Donghi, Tulio. “Tradición política española e ideología revolucionaria de Mayo”, Prometeo, Buenos Aires, 2009 [1961].

Autora

Escrito por Mercedes Roch para la Edición #106 de Enciclopedia Asigna, en 12/2021. Mercedes es Profesora y Licenciada en Historia, egresada de la Universidad de Buenos Aires, Argentina. Maestranda en Estudios Culturales Latinoamericanos. Autora de Primeras (Editorial Malisia).