La palabra frontera proviene del latín frontis que significa “frente”. Así, una frontera es el límite que divide a dos o más territorios. Si bien la misma puede estar definida por un accidente natural o por una delimitación artificial, en todos los casos decimos que las fronteras son líneas imaginarias, ya que han sido establecidas por los seres humanos. En este punto, es preciso señalar que, aunque suele haber consenso respecto de los límites fronterizos, en muchas ocasiones su trazado puede generar conflictos.
La importancia fundamental de las fronteras está dada por el hecho de que el territorio que se encuentra ubicado al interior de ellas representa el espacio sobre el cual un Estado es soberano. De esta forma, atravesar la frontera de otro Estado constituye una acción ilegal y puede devenir en enfrentamientos armados.
Historia de las fronteras
La historia del trazado de las fronteras se remonta, en primera instancia, al período del expansionismo europeo sobre el resto de los continentes: fue en ese momento que comenzaron a marcarse los límites de los territorios conquistados. Un ejemplo de frontera negociada de aquel período lo constituye el Tratado de Tordesillas (1494), el cual estableció las fronteras entre los territorios que correspondían a España y los que correspondían a Portugal y, sobre cada uno de ellos, se aplicó la autoridad del reino correspondiente.
No obstante, el momento álgido del trazado fronterizo se encontró en relación con el establecimiento de los Estados nacionales durante los siglos XVIII y XIX. La razón estuvo dada porque los mismos debían dar cuenta de su soberanía, a la vez que buscaban generar sentido de pertenencia en la población que se hallaba en dicho territorio. En este sentido, es preciso señalar que, al trazarse las fronteras, ocurrió que culturas que diferían entre sí fueron agrupadas dentro de un mismo Estado-nación, o que una misma cultura quedara dividida por trazados fronterizos.
Clasificación
Para un mejor análisis, las fronteras se pueden clasificar en:
• Fronteras naturales: son aquellas que están marcadas por accidentes geográficos como ríos, cadenas montañosas, mares, entre otros. En este punto es preciso tener en cuenta que, aunque los límites sean establecidos tomando como referencia a barreras naturales, las fronteras no dejan de ser imaginarias ya que son establecidas por los seres humanos. Un ejemplo de ello lo constituyen Argentina y Chile, países separados por la Cordillera de los Andes.
• Fronteras artificiales: en este caso nos referimos a aquellas fronteras que no están limitadas por un accidente geográfico sino que se han tomado como referencia otros parámetros ya sean estos históricos, políticos, diplomáticos. Un claro ejemplo de este tipo de fronteras lo constituye el mapa del continente africano. Como el trazado fronterizo se decidió arbitrariamente en el Congreso de Berlín (1878), varias de las divisiones limítrofes están marcadas por líneas rectas.
Además de lo mencionado, las fronteras se subclasifican en:
• Terrestres: delimitan la porción de tierra sobre la cual el Estado tiene jurisdicción y soberanía. Este tipo de fronteras separan a distintos países pero también se dan dentro de un mismo territorio estatal.
• Aéreas: refieren al espacio aéreo delimitado sobre el cual cada Estado puede aplicar su autoridad.
• Marítimas: responden a la porción de mar que es administrada por cada Estado. Se trata de una extensión de 200 millas náuticas respecto de su frontera terrestre.
Ejemplos de conflictos fronterizos
La división de los territorios mediante trazados fronterizos puede devenir en largos y diversos enfrentamientos debido a que no siempre hay consenso respecto de su delimitación. Un ejemplo de conflicto fronterizo lo constituye el caso del territorio del Esequibo, históricamente disputado por Venezuela y Guyana. El mismo se encuentra administrado por Guyana pero es reclamado como propio por Venezuela en base al Acuerdo de Ginebra del 17 de febrero de 1966.
Otro ejemplo lo constituye el caso de la Península de Crimea, la cual es disputada por Rusia y Ucrania. Este territorio que fue conquistado por el imperio ruso a fines del siglo XVIII, pasó a estar administrado por la República Socialista Soviética de Ucrania durante el período soviético. A partir del Euromaidán de 2014, Crimea decidió adherirse formalmente a Rusia por medio de un referéndum pero Ucrania vio en este acto una violación a la Constitución y a la integridad territorial ucraniana. Actualmente, Rusia y Ucrania se encuentran en guerra.