- 21/09/1954
- 1979
- 1982
- 1987
- 1993
- 2003
- 2005
- 2006
- 12/2012
- 2015
- 2018
- 10/2019
- 2020
- 2021
- 08/07/2022
Nació en el seno de una familia con una larga tradición en la política japonesa. Su abuelo y su tío abuelo ejercieron la misma función de primeros ministros, y su padre fue secretario del PLD.
Estudió política en las Universidades Seiki, en Tokio, y en la del Sur de California.
Trabajó en Kobe Steel, la empresa productora de acero más importante de Japón.
Asumió como asistente del ministro de relaciones exteriores.
Se casó con la DJ y activista, Akie Abe. La pareja no tuvo hijos y estuvieron juntos hasta su fallecimiento.
Fue elegido miembro de la Cámara de Representantes de Japón, por el distrito de Yamaguchi.
Asumió la secretaría general del PLD.
Se desempeñó como secretario jefe del gabinete de japón, durante la gestión del primer ministro Junichiro Koizumi.
Asumió como primer ministro, siendo el más joven de la historia (52 años) y como presidente del PLD.
Ocupó el cargo por un breve período de un año a razón de algunas controversias y por sus problemas de salud.
Volvió a asumir como primer ministro en medio de la crisis que desató en el país el tsunami ocurrido meses antes, en marzo de 2011.
Cabe destacarse que, dicho evento desencadenó una catástrofe nuclear en la planta de energía de Daiichi, en Fukushima, el más impactante de la historia reciente desde el de Chernobyl.
Tuvo que realizar una evacuación masiva de los habitantes, unos once mil, que se quedaron sin casas ni nada, y que incluso, tardaron años en volver a su ciudad.
Su figura resurgió como una esperanza para superar las problemáticas económicas y sociales que devinieron tras el desastre natural inesperado.
Implementó una serie de medidas económicas que ayudaron a reactivar el sector económico.
El plan se conoció como “abenomics” y consistió en: estimular la moneda, aumentar el gasto público y ejecutar reformas estructurales.
La iniciativa dio excelentes frutos porque animó el consumo y la inversión.
Por otra parte, resultó inédita su reforma en materia militar, la más importante del país en 70 años.
Su gestión aprobó una nueva interpretación constitucional que permitió a las tropas del país incursionar en combates en el exterior, respetando ciertas condiciones. Dicha decisión avaló el regreso del país a los frentes de batalla tras la participación en la Segunda Guerra Mundial.
Argumentó que la modificación era necesaria para poder reaccionar efectivamente a un contexto de seguridad mundial más complejo.
En el plano internacional, destinó esfuerzos para mejorar el vínculo bilateral con China, incluso, mantuvo una histórica conversación con el presidente chino, Xi Jinping.
Sin embargo, como contrapartida, promovió la unión de los aliados del Pacífico para enfrentar la expansión china.
Fortaleció la relación con Estados Unidos, especialmente con el expresidente Donald Trump, a quien apoyó en cada embate contra Corea del Norte.
Fue presidente Pro tempore del G-20
Gestionó la abdicación del emperador Akihito, el primer monarca que renunció en dos siglos; lo sucedió su hijo Naruhito.
Renunció a su cargo por problemas de salud que lo venían afectando desde larga data. Padecía una enfermedad intestinal inflamatoria crónica.
A pesar de haber dejado el poder, se mantuvo muy activo políticamente y asumió un rol de liderazgo dentro del PLD.
Fue partidario de continuar en el sentido de una sólida y fuerte política de seguridad.
Respecto de su gestión ante la pandemia de Covid, se le cuestionó una reacción tardía, tanto en lo inherente a decretar el aislamiento poblacional para frenar los contagios, como en las estrategias y disposición de recursos sanitarios.
Enojó a China tras solicitar a sus aliados un mayor compromiso para defender la democracia en Taiwán, contra la cual, el grande asiático, combate cada vez con mayor ahínco.
China le respondió acusándolo de entrometerse en su política interior y de atacar su soberanía.
Bajo su gestión, se celebraron los Juegos Olímpicos de Tokio, con un año de retraso a razón de la pandemia de COVID.
Lo mataron de varios disparos, durante un acto de campaña, celebrado en la calle, al frente de la estación de tren Yamato Saidaiji, en la ciudad de Nara, en el oeste del país. Tenía 67 años.
Había viajado hasta allí para acompañar y apoyar al candidato de su agrupación política, ante las inminentes elecciones parlamentarias.
Si bien recibió rápida asistencia médica, cuando llegó al hospital estaba en situación de paro cardiorrespiratorio. Se le practicaron técnicas de reanimación, sin embargo, nada prosperó y falleció.
El momento en que yació en el piso tras el brutal ataque fue captado por las cámaras de varios medios de comunicación que estaban cubriendo el evento.
El hecho fue presenciado por decenas de personas que asistieron al acto, que pudieron contar en primera persona lo ocurrido y expresaron su consternación.
Minutos después del ataque, un hombre de 41 años fue detenido en las cercanías de la escena del crimen portando un arma. Se lo identificó como Tetsuya Yamagami, un ex miembro del ejército japonés, que en la actualidad estaba desempleado. Se desempeñó en el área naval de las Fuerzas de Autodefensa, ocupadas de la defensa de Japón durante 3 años, y fue dado de baja en el año 2005.
El arma que utilizó para asesinarlo habría sido de creación casera.
En su primera declaración tras la aprehensión, confesó sentir un profundo odio hacia un grupo al que el ex premier estaba asociado.
Vale mencionarse que, tras dispararle, no intentó fugarse.
El actual primer ministro de Japón, Fumio Kishida, expresó sus condolencias, indignación y sorpresa ante el evento.
Se suspendieron todos los actos proselitistas en signo de luto.