El concepto de relato histórico puede entenderse desde dos perspectivas: como un género historiográfico y como un subgénero de la novela.
Un género historiográfico
Algunos historiadores, políticos y militares de la civilización griega y romana inauguraron un nuevo género, la historiografía, que podríamos definir como el registro de los acontecimientos históricos. Los autores más destacados de este género fueron Herodoto, Tucídides y Estrabón en el mundo griego y autores como Tito Livio o Suetonio en la civilización romana. En sus obras narraban acontecimientos reales (batallas, situaciones políticas de su tiempo, conflictos sociales…). Estos relatos ofrecían una doble dimensión: un sentido literario y, paralelamente, un enfoque histórico. Para los historiadores estos relatos del pasado ofrecen un valor testimonial de gran interés, pues los acontecimientos que se describen en estas obras permiten conocer los hechos del pasado, los personajes que intervinieron y las circunstancias que actuaban como contexto histórico.
El relato histórico del mundo clásico supuso el inicio de un rumbo para el tratamiento de la propia historia como disciplina científica. Además del relato histórico tradicional, existen otras fuentes historiográficas (la prensa, la radio, el cine, la publicidad o la televisión).
La historia como relato es una síntesis de aspectos objetivos y subjetivos. El historiador necesita recurrir a fuentes objetivas y aportar unos datos concretos. Sin embargo, esos elementos objetivos son interpretados desde su subjetividad.
La novela histórica
Relato histórico y novela histórica son conceptos equivalentes. La novela histórica es un género literario que normalmente se presenta con una particularidad: la fusión entre ficción y realidad. Normalmente el escritor de relatos históricos inventa unos personajes y una trama y todo ello lo sitúa en un contexto histórico determinado. En este sentido se podría decir que este tipo de relatos crea una ficción envuelta en hechos reales.
La novela histórica como género es, probablemente, una de las tendencias narrativas con más aceptación entre los lectores. De hecho, algunas novelas históricas se han convertido en auténticos best sellers («El viajero» de Gary Jennings narra los viajes de Marco Polo, «Los pilares de la Tierra» de Ken Follet cuenta la construcción de una catedral gótica en el contexto de la Edad Media y «Espartaco» de Howard Fast es la historia de un esclavo tracio del siglo l a. C que lideró una rebelión contra los romanos)
La relación entre la historiografía y la novela histórica
El ejemplo de la novela «Espartaco» nos sirve para ilustrar el nexo de unión entre los relatos historiográficos y la novela histórica, pues la figura de este personaje la conocemos a través de Plutarco, un historiador griego contemporáneo de Espartaco y que dio a conocer a este personaje en su obra «Revuelta de Espartaco», la fuente histórica de la novela de Howard Fast.