De manera sencilla, el impacto ambiental podría definirse como el efecto que tiene el Hombre sobre el medio natural. O dicho de otro modo, el impacto ambiental se produce cuando se produce una alteración del medio ambiente debido a la acción humana.
Impacto ambiental positivo vs Impacto ambiental negativo
Habitualmente, el concepto de impacto ambiental suele tener una connotación negativa, estando muy asociado a los problemas de los recursos hídricos y agrícolas o de la fauna y flora de un lugar. Sin embargo, de igual modo, hay que hacer constar que el impacto natural no es negativo per se, sino que también puede ser positivo. Esto es así cuando la acción humana permite que se produzcan cambios favorables en el medio ambiente. Un buen ejemplo de ello podría ser la construcción de un parque donde anteriormente se ubicaba una escombrera.
Aún así, esto no quita para que lo más común sea que el impacto ambiental pueda calificarse como negativo. En estos casos, los efectos del impacto ambiental repercuten directamente en una pérdida de productividad ecológica y de valor naturalístico, así como en un aumento de la contaminación, la erosión y otros riesgos ambientales.
Ejemplos de impactos negativos hay múltiples, desde la caza indiscriminada que reduce la fauna de ciertas zonas hasta la contaminación del aire, la tierra y el agua fruto de la eliminación descontrolada de residuos industriales.
Clases de Impacto ambiental
El interés por estudiar el efecto de las acciones humanas en el medio natural no es algo reciente, sino que se remonta a los orígenes del movimiento conservacionista. Los estudios desarrollados en este tiempo han terminado por hacer una clasificación de los impactos ambientales dividiéndolos en cuatros grandes grupos según lo prolongado de sus efectos en el tiempo.
Así, los impactos ambientales irreversibles serían aquellos cuyos efectos sobre el medio natural son de tal magnitud que resulta imposible revertirlos para volver a la situación original. Un ejemplo de impacto irreversible serían las explotaciones mineras.
Frente a estos impactos irreversibles estarían los reversibles, de cuyos efectos el medio natural puede recuperarse ya sea a corto o largo plazo. El mejor ejemplo de ello serían las especies en peligro de extinción.
En una magnitud menor se encontrarían los efectos de los impactos temporales, los cuales pueden revertirse en poco tiempo hasta eliminar todo rastro de los mismos, como por ejemplo una crecida puntual de un río.
Por último estarían los impactos persistentes, cuyos efectos se extienden a lo largo del tiempo, como sucede por ejemplo en el caso del hundimiento de un buque petrolero.
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