El brillo es la cantidad de flujo de luz que emite un determinado cuerpo. En este sentido, el flujo luminoso está sujeto a cuántas partículas que se hallan en determinada cantidad de espacio (superficie) y, en relación al tiempo, son capaces de emitir luz.
Además, también se hace referencia al brillo cuando se habla de aquella propiedad física que poseen ciertos cuerpos en particular, como los minerales, cristales o las rocas, de absorber luz y por lo tanto, el brillo es emitido a partir de esta interacción. La cantidad de brillo dependerá de: a) el poder de absorción del mineral, en relación a cada uno de los colores; b) la propiedad de refracción; y c) el pulido de cada una de las caras o lados del mineral. De este modo se podrán generar diferentes tipos de brillo: metálico, submetálico y no metálico.
Por otra parte, en el campo de la fotometría, el brillo es una unidad de intensidad luminosa emitida por una pantalla. En todos los aparatos electrónicos que poseen pantalla, se puede configurar la cantidad de brillo emitido, que en general también se encuentra en relación con el gasto o ahorro de energía. Por ejemplo, en el caso de una PC, se puede establecer una configuración de pantalla que emita el brillo justo y necesario, a fin de ahorrar energía, opción conveniente cuando se utilizan ordenadores portátiles y se busca aumentar el tiempo de autonomía energética por el uso de baterías.
Del mismo modo en las cámaras fotográficas también se puede configurar el tipo y cantidad de brillo, y quienes son aficionados o expertos en este arte, saben muy bien cuánto influye en la toma de una fotografía qué tipo de brillo se aplica al momento de obtener la pieza de fotografía, como así también luego se pueden mejorar o modificar con softwares especializados, como es el caso del famoso Photoshop.
Por último, muchas veces se hace referencia a “brillante” para calificar la idea, obra o expresión de una persona, equivalente a “excelente” o “sobresaliente”. Que una idea, obra o expresión se a brillante significa que uno está muy de acuerdo con ella, que define una cuestión de manera correcta o que propone algo que se considera innovador.
Asimismo, podemos afirmar que existen «brillos artificiales», tales como lo son algunos que podemos ver en prendas de vestir, que denominamos «brillosas», y que tienen en su composición pequeñas partículas brillantes, o que por su aspecto se denominan como tal.