Un restaurante es un comercio que se caracteriza por servir distintos platos para consumo de sus clientes. También es posible consumir aperitivos o tomar bebidas de modo individua en el mismo. Un restaurante suele consistir de un amplio salón en el que se encuentran ubicadas distintas mesas con sus respectivas sillas y en donde los clientes se sientan a comer. En las mismas se encuentra una carta en la que se presentan todas las comidas que se pueden consumir, tanto como plato principal como para postre, como asimismo se presentan los precios de las mismas. Un camarero suele tomar los pedidos de los clientes y traerlos cuando están listos.
Un restaurante suele ser un sitio para socializar además de uno para comer. En efecto, en general los mismos concitan a la gente en ocasiones especiales o cuando desean socializar entre sí. Esto hace necesario que la ambientación sea la adecuada, con buen mobiliario y por supuesto buenas condiciones de higiene. Dada esta situación, se espera además que mantenga distintas medidas de seguridad que dejen de lado cualquier inconveniente y es por ello que deben tener alguna habilitación especial por parte de las autoridades; por supuesto, esta circunstancia dependerá en buena medida del país en cuestión, pero por lo general es una condición que se repite con frecuencia.
Existen restaurantes que se caracterizan por ofrecer platos de una región del mundo específica. Este tipo de establecimientos sin lugar a dudas son los más interesantes por el hecho de que ofrecen la posibilidad a sus clientes de probar sabores que son populares en zonas del mundo que quizá nunca visitarán. En estos casos, la comida se prepara de forma que replique aquella que se sirve en dichos lugares, aunque en ocasiones se deberá apelar a sustitutos en algunos ingredientes por falta de los mismos o por considerárselos de poca aceptación para el público local.
Comer en un restaurante es una experiencia que la gente con vida social florida tiene a menudo. Lamentablemente, en algunos contextos puede resultar caro llevar esta práctica demasiado lejos, es decir, hacerla demasiado asidua. No obstante, en algunos países se encuentra casi naturalizado el hecho de comer en uno en los fines de semana, haciendo una reunión con familiares y amigos. Esta circunstancia solo se ve empañada en períodos de crisis, en donde las limitaciones económicas suelen afectar primero al sector gastronómico por el hecho de considerarse los gastos en el mismo un tanto superfluos.