La mitología griega es sin dudas uno de los conjuntos de mitos y leyendas más ricos en historias y en personajes. Desde dioses hasta curiosas criaturas como los centauros desfilan en esta clásica mitología. El centauro supo ser una criatura ciertamente rara, cabeza, torso y brazos de ser humano pero sobre el cuerpo y las patas típicas de un caballo.
En tanto, el personaje que nos ocupa en estos momentos, Quirón, fue uno de los centauros más célebres de la mitología griega. Y también uno de los que más sobresalió porque no disponía de las señas características de este tipo, porque Quirón era bueno y muy inteligente…
Hijo del titán Crono, de la llamada primera generación, y de una deidad del océano, Fílira. La historia cuenta que Crono estaba buscando a Zeus y en un momento se cruza con la oceánide y futura madre de Quirón. Como Crono tenía a su esposa Rea decide convertirse en caballo para mantener relaciones con la oceánide sin que se note que se trataba de él. Esta habría sido la causa del nacimiento de un centauro, cuando Fílira da a luz al hijo que tuvo con Crono.
La leyenda cuenta que Quirón vivía al igual que muchos otros centauros en el monte Pelión, más precisamente en su cumbre. Desde este preciso lugar, Quirón, llevó a cabo una impecable y continua tarea formadora de héroes. Por ejemplo, Jasón, uno de los héroes más recordados de la mitología griega se educó con el propio Quirón en este monte.
También Quirón fue el tutor de otro enorme héroe como es Aquiles, recordado por su intervención en la Guerra de Troya y asimismo por ser el protagonista de la famosa obra de Homero, la Ilíada.
Hércules, otro héroe reconocido por la tremenda fuerza que supo desplegar también sería instruido por Quirón.
Como apreciamos, Quirón, salió de la media de los centauros por su sabiduría y por su capacidad de transmitirla de manera efectiva a las generaciones de héroes.
Por otro lado, debemos mencionar que se destacaría en la práctica de la medicina.