La optometría es la tecnología que se ocupa de la salud ocular, especialmente de todos aquellos aspectos relacionados con la medición de la visión: graduación de lentes y lentes de contacto, detección temprana, funcionalidad visual y, en definitiva, todo lo concerniente a la salud, pero no desde un punto de vista médico sino desde parámetros de medición (el término optometría incorpora el sufijo metría que significa precisamente medida).
Mientras el oftalmólogo se centra en la visión desde una perspectiva global, el profesional de la optometría se ocupa de mejorar la calidad visual de los pacientes a través de técnicas correctoras de la visión.
La oftalmología y la optometría son áreas afines y complementarias. En la práctica, un oftalmólogo puede recurrir a una optometrista e igualmente a la inversa.
Tareas específicas de la optometría y salidas profesionales
La optometría va más allá de la simple adaptación de lentes o de lentes de contacto. De hecho, esta disciplina aborda la prevención, la detección y la corrección de las distintas anomalías visuales.
La optometría tiene apartados o áreas diversas: baja visión, contactología, visión binocular, patología ocular o campimetría. Todas ellas se orientan a la optimización de la visión del paciente, de tal forma que se encuentre una solución técnica a su limitación visual.
En cuanto a las salidas profesionales la principal es el trabajo en un establecimiento de óptica. Los profesionales de este sector también pueden colaborar con clínicas oftalmológicas o en relación con áreas de salud laboral, de seguridad vial o de ergonomía.
La baja de visión
Hay personas con una agudeza visual inferior al 10% y con un campo visual muy reducido. Estas anomalías son detectadas por el oftalmólogo, pero es el optometrista quien debe encontrar una solución técnica para que el paciente aproveche al máximo su resto de visión.
Hay que tener en cuenta que en un porcentaje elevado de casos de baja visión es posible la rehabilitación del paciente a través de ayudas ópticas diversas: la lupa-televisión, sistemas de realidad virtual, software accesible en el ordenador, mejora en el contraste en el soporte de lectura, uso de telescopios y otros dispositivos o estrategias para maximizar la baja visión.
Optometría pediátrica
La detección de los problemas oculares en la infancia es fundamental. Debido a ello existe una disciplina que se centra en la visión de los niños, la optometría pediátrica. Un profesional de esta rama debe realizar toda una serie de pruebas: el reflejo oculovestibular, el reflejo cocleopalpebral, la prueba de la mirada preferencial para determinar la agudeza visual o el tambor optocinético, entre otras muchas pruebas.