- 24/08/1899
- 1914
- 1921
- 1923
- 1924
- 1930
- 1938
- 1946
- 1944
- 1949
- 1950
- 1955
- 1961
- 21/09/1967
- 1971
- 1975
- 14/06/1986
Nació en Buenos Aires, en una familia con ascendencia portuguesa y española, de larga tradición en los campos político y militar de la Argentina.
Su padre era abogado, aunque trabajaba de profesor de psicología, mientras que su madre realizó tareas de traducción de libros.
Se mudó con su familia a Suiza con el objetivo de tratar el problema visual que padecía su padre, y que más tarde lo atacaría a él mismo: una ceguera progresiva.
Cursó sus estudios secundarios en el Collège Calvin.
Regresó a la Argentina y tanto sus ensayos como sus poemas empezaron a publicarse en revistas de tendencias ultraístas.
El Ultraísmo fue un movimiento de enorme significatividad, que nació en España en 1918.
Se caracterizó por el empleo de la metáfora; se apartó de los adjetivos que no sumaban, y de la tendencia ornamental del discurso, eliminó la rima, los tecnicismos y neologismos.
Por otra parte, Borges, fue un referente del Realismo Mágico, un Movimiento literario surgido en la primera mitad del siglo XX cuyo objetivo fue presentar lo irreal como algo corriente. Está emparentado con la literatura fantástica porque aplica los mismos procesos, aunque, hay notables diferencias entre ambos.
Por otro lado, empezó a trabajar como bibliotecario, a brindar conferencias y como docente.
Editó su primer libro de poemas, titulado Fervor de Buenos Aires.
Fundó la revista literaria Proa, que a pesar de su corta duración sentó las bases de una forma de expresión narrativa borgiana.
Colaboró en la emblemática revista Sur, dirigida por la escritora Victoria Ocampo. Esta revista también marcó una época de oro en materia de crítica literaria.
Borges entabló una amistad cercana con la propia Victoria Ocampo, con su hermana Silvina, y con el marido de ésta, Adolfo Bioy Casares, otro autor argentino notable y celebrado, casi como Borges.
Trabajó como bibliotecario en la Biblioteca de Miguel Cané.
En las elecciones apoyó a la Unión Democrática contra el candidato Juan Domingo Perón, quien resultó ganador.
Se manifestó abiertamente opuesto al gobierno peronista, al que calificó de dictadura. Esto le valió para siempre el mote de antiperonista y gorila, como se suele llamar despectivamente a quienes no comulgan con el peronismo.
Se desempeñó como docente de literatura inglesa en el Instituto Libre de Segunda Enseñanza y en la Universidad Católica Argentina.
Editó el cuento Ficciones, que revolucionó la literatura local y lo proyectó internacionalmente.
Publicó una de sus obras cumbre: El Aleph, una recopilación de cuentos fantásticos, que se erigió en la más leída del autor. Las vueltas de tuerca y los giros asombrosos son el verdadero gancho de la historia.
Fue designado Presidente de la Sociedad Argentina de Autores.
Fue nombrado Director de la Biblioteca Nacional Argentina, cargo que ocupó durante 18 años, y profesor de literatura inglesa en la UBA.
La caída del peronismo y la asunción de la Revolución Libertadora lo sacaron del ostracismo que sufrió en las presidencias de Perón.
Tras sufrir una ceguera progresiva quedó ciego por completo.
Recibió el premio español Formentor de las Letras, compartiéndolo con Samuel Beckett, que de alguna manera le abrió las puertas del reconocimiento de la literatura internacional.
Se casó con Elsa Millán, un vínculo poco feliz, según ambos reconocerían más tarde. El matrimonio terminó tres años después.
Recibió el Premio Jerusalén, una distinción literaria que se entrega a aquellos autores que han desplegado un rol destacado a favor de la libertad.
Un premio que codició, pero que siempre le fue esquivo, muchos asumen que, a razón de sus ideas políticas ultraconservadoras, fue el Premio Nobel de Literatura.
Afianzó la relación con su segunda esposa María Kodama, una exalumna y luego asistente, que lo acompañó hasta el final de su vida.
Falleció en Ginebra, Suiza, a los 86 años, a causa de un cáncer de hígado.
Tras su muerte, Kodama, se convirtió en su única heredera y en la encargada de llevar por todo el mundo el legado entrañable y tan rico culturalmente de su esposo.
En Argentina existen infinidad de espacios culturales y de propuestas escultóricas que lo recuerdan y homenajean: Centro Cultural Borges y Fundación Internacional Jorge Luis Borges, ambas en CABA.
Asimismo, tiene un busto en el Rosedal, una estatua en el icónico Café La Biela de Recoleta y la estatua en la Biblioteca Nacional.