La estabilidad cambiaria es un concepto que remite a la estabilidad del precio de la moneda doméstica contra divisas. La estabilidad cambiaria es un indicio de la estabilidad de la economía en general, de la salud de la ésta. Por el contrario, a volatilidad del tipo de cambio puede dar indicios de problemas estructurales en la economía de un país, problemas que pueden desencadenar en otro tipo de consecuencias más adversas. De más está decir que la estabilidad cambiaria es un concepto que remite a una economía en donde es inexistente un control de capitales; caso contrario, lo que existirá es un tipo de cambio artificialmente fijo.
El tipo de cambio es el valor que adquiere una moneda en un país con respecto a la moneda extranjera utilizada para operaciones comerciales internacionales. Cuando existen cambios abruptos de este precio en períodos relativamente cortos de tiempo (en promedio un año), puede decirse que existe inestabilidad cambiaria. Así, por el contrario, una estabilidad del tipo de cambio se entiende como una volatilidad muy limitada del mismo. Mantener un tipo de cambio estable significa que los precios de la economía medidos en divisas tenderán también a la estabilidad; por el contrario, cuando existen movimiento bruscos en el tipo de cambio, los precios de una economía, que en alguna medida dependerán de insumos adquiridos en el exterior con divisas, también tenderán a variar.
Un motivo por el que puede existir inestabilidad en el tipo de cambio es el hecho de que en el país exista inflación. En efecto, dado que los precios de una economía aumentan en relación a la moneda doméstica, o lo que es lo mismo, el precio de la moneda doméstica disminuye en función de los demás precios de la economía, puede entenderse que lo mismo sucede en relación a las divisas. Dado que mantener el tipo de cambio fijo o devaluarlo paulatinamente en inferior medida a la inflación significará que existe inflación medida en divisas, puede entenderse que esta situación puede ser extremadamente perniciosa por la pérdida de competitividad que trae aparejada; en algún momento se llegará a una devaluación abrupta que corrija los desequilibrios.
La estabilidad cambiaria se defiende evitando que exista inflación, evitando que exista un incremento generalizado de los precios de la economía. Ahora bien, la principal causa de la inflación se debe a una emisión de dinero desproporcionada por parte del estado. Cuando existe una situación como la descrita, los precios tenderán a subir, hecho que hará que en algún momento los agentes económicos se asusten y reduzcan su demanda de dinero.