Un nido, un artilugio, un edificio o un puente tienen algo en común, pues todos ellos son construcciones. Así, una construcción es todo aquello que se crea a partir de una serie de elementos adecuadamente combinados.
Este término proviene del vocablo en latín construere, que quiere decir fabricar, erigir u obrar. Empleamos esta palabra en áreas como la albañilería, la ingeniería o la arquitectura. Por otro lado, también la utilizamos para referirnos a todo tipo de realidades y circunstancias en las que se realiza algo a partir de unas ideas previas.
Hombres y animales creamos estructuras para mejorar las condiciones de vida
Si nos centramos en el ser humano, fabricamos cosas de naturaleza muy distinta. Construimos historias y para ello nuestra mente junta las diferentes piezas, las palabras. Este mismo proceso es el que utilizamos para fabricar cosas con algún tipo de elementos materiales.
El hombre desarrolla porque tiene un sistema neuronal diseñado para recibir información, procesarla y finalmente crear nuevas realidades.
En el mundo animal algunas especies crean nuevas estructuras y, por lo tanto, son seres que construyen. Los nidos de los pájaros, las madrigueras o los panales de las abejas son ejemplos de la capacidad creadora del reino animal.
Uno de los sectores productivos más importantes
El sector de la construcción es estratégico en la mayoría de países. Hay que tener en cuenta que en cualquier edificación intervienen todo tipo de profesionales: arquitectos, ingenieros, albañiles, transportistas, instaladores, etc. Cada uno de ellos se encarga de una función específica y la suma de todas las actividades da como resultado una edificación con algún objetivo concreto.
Las primeras construcciones humanas datan de la prehistoria y el material empleado para ello fueron las piedras de grandes dimensiones. Estas estructuras tenían un sentido simbólico y ritual. Con posterioridad, concretamente en el periodo neolítico, aparecieron las primeras ciudades en la antigua Mesopotamia. Aquellos núcleos urbanos representaron los pilares de la civilización humana.
Con la revolución urbana en Mesopotamia y las primeras construcciones se dio el primer paso para el establecimiento de la vida económica y social de la humanidad.
En el siglo XXI los materiales para la construcción nada tienen que ver con las piedras talladas. En la actualidad se construye con titanio, plásticos reciclados, paneles de fibra, grafeno ligero, resinas y hormigones autorreparables.