Biografía de Comenio

Tenía 78 años. Juan Amos Comenio fue un teólogo, filósofo y pedagogo checo, emblema de la educación moderna democrática. Fue pionero en proponer un sistema de enseñanza que le reconozca y conceda el derecho al saber a todos los hombres, sin distinciones. Referente del Realismo Pedagógico. Sus singulares aportes a la sistematización escolar lo erigieron en el gran educador de la modernidad y le valieron la consideración del mayor reformador social de su tiempo. El eje de su propuesta pedagógica se mantiene vigente hoy. Su obra cumbre y más valorada es Didáctica Magna. Estableció tres fines para la educación: la erudición, la virtud y la piedad o religión.

28/03/1592

Nació en la región de Moravia, en República Checa, con el nombre de Juan Amos Comenio, sin embargo, en la historia, se lo denominó simplemente Comenio.

Estudió teología, fue profesor y rector de escuela antes de su ordenamiento como sacerdote.

Perteneció a la congregación Unidad de Hermanos Moravos, quienes afirmaron gran parte de los principios luteranos, aunque no así sus propuestas políticas.

1618

Se exilió durante la guerra de los 30 años y por ello es por lo que vivió y trasladó su influencia a varios países europeos: Polonia, Holanda, Suecia, Inglaterra. El episodio bélico se extendió entre 1618 y 1648, y enfrentó, al Sacro Imperio Romano Germánico, con una alianza de países y regiones protestantes que se oponían al liderazgo de la dinastía Habsburgo en Europa.

Cuando el ejército imperial ocupó Moravia, los ciudadanos fueron intimados a exiliarse, y se marchó a la ciudad de Leszno, en Polonia.

1630

Publicó Didáctica Magna, una obra en la cual sistematizó su plan pedagógico. El contenido aportó tal revolución en una época que estaba a la espera de una reforma educativa más inclusiva, cuestión que precisamente él promovió incansablemente, y entonces no tardó en ser convocado por diversos gobernadores y monarcas, ansiosos, por contar con su erudición y plan, para renovar sus sistemas educativos.

Cabe destacarse que la empezó a escribir en 1628, se publicó en 1630, pero continuó ampliándola hasta 1657.

Fue considerada un método pedagógico per se, para enseñar con agilidad y manejando los tiempos. En lugar de enseñar palabras «sombras de las cosas», Comenio, consideró que la escuela debe enseñar el conocimiento de las cosas.

En el eje de su propuesta educativa se ubicó la pansofía, o ideal pansófico, que consiste en enseñarle todo a todos; la escuela debe ser un espacio en el cual se eduque a todos los hombres sin distinciones de ninguna clase.

Justamente, en este punto, es que puede ser considerado un pionero de la democratización de la enseñanza, porque propuso y promovió que se enseñe lo mismo a todos.

Un párrafo aparte merece su mención a la mujer, en aquellos tiempos, no tenida en cuenta a la hora de la educación, sin embargo, Comenio, sostuvo que la mujer tiene una mente ágil y apta para entender la sabiduría como cualquier hombre, y a menudo, más que él.

Otro aporte novedoso fue su idea que la educación debía ser algo permanente, no efímero, no de un cierto tiempo de la vida del hombre… es decir, estaba convencido que el individuo nunca deja de aprender mientras exista; la educación humana nunca finaliza porque los seres humanos, como especie, siempre estamos demandando nuevos conocimientos.

Se le debe el «diseño» del aula tal como se sigue presentando hoy en los establecimientos educativos de los diferentes niveles: el profesor parado delante del grupo de alumnos.

En su proposición, el aprendizaje, debía comprender 24 años, y correspondería a cuatro tipos de escuelas: materna (0 a 6 años), escuela elemental o vernácula (6 a 12 años), escuela latina o gimnasio (12 a 18 años), y la academia o universidad (18 a 24 años).

En tanto, en cada familia, debería existir una escuela materna; en el municipio o aldea una primaria; en cada ciudad una secundaria y preparatoria; y en cada capital la universidad.

Asimismo, sostuvo que la enseñanza debería unificarse, o sea, distribuirse del siguiente modo: escuela materna (cultivar sentidos y enseñarle al niño a hablar), escuela elemental (desarrollar lengua materna, escritura, lectura, animar la memoria, la imaginación, el canto, enseñar ciencias sociales y aritmética), la escuela latina (estudiar las ciencias).

Y para los estudios universitarios, aconsejó viajes y trabajos prácticos, donde se formarían funcionarios y guías espirituales. Los más capaces tendrían acceso a la academia. Esto último es evidencia, que, en su tiempo, hubo un gran avance en los contenidos y métodos, pero la democratización no fue total ni un hecho consumado.

Para diagramar el sistema escolar se inspiró en las estaciones del año. Creía que la didáctica debe tener en cuenta la marcha de la naturaleza. Para él la enseñanza debía seguir el ritmo de ésta…

La educación del hombre debía iniciarse en la primavera de la vida (infancia), mientras que la juventud era el verano, la adultez el otoño, y la vejez el invierno.

Las horas de la mañana son las ideales para estudiar y todos los contenidos para aprender deben organizarse de tal modo que se correspondan con la edad de los estudiantes; no creyó conveniente que se les enseñe algo que no sean capaces de comprender aún.

Estaba en contra de la aplicación de castigos corporales, algo recurrente en la época para prevenir la mala conducta.

Propuso y defendió el uso de la lengua materna durante los primeros años del aprendizaje, desechando la supremacía que hasta ese momento ostentaba el latín. Más adelante, en la formación del hombre, sí propone que se lo enseñase, pero con un formato más acotado.

Luego, ya en la adultez, es necesario el aprendizaje del griego, hebreo y lengua arábiga, para poder leer los textos clásicos e interpretarlos.

1631

Editó la obra Janua Linguarum reserata que también logró una exitosa acogida en la época. Abordó la enseñanza del latín, pero con una metodología más breve.

1638

Participó de la reforma educativa impulsada en Suecia.

El fundamento de su pedagogía es religioso, aunque también admiró las técnicas y artes plásticas, y buscó conciliar la actitud naturalista con la religiosa. El objetivo de la educación deberá ser el logro de la felicidad con Dios. También, le atribuyó una notable relevancia a los sentidos, las demostraciones gráficas y los experimentos.

Para él, el hombre necesita de la educación, de ella procede la gracia divina, y, además, una buena educación, producirá excelentes frutos.

Estuvo atento a todos los detalles, promovió que: las clases debían empezar temprano; el contenido debía plantearse de lo general a lo particular; de lo más sencillo a lo más complejo, avanzar despacio con los conocimientos y enseñar también con los sentidos.

Desarrolló un método propio para aplicar en la planificación del aula que consta de tres pasos: autopsia (intuición), autocresia (aplicación de lo estudiado) y autopraxia (lo aprendido).

1641

Recibió una propuesta del gobierno inglés para sistematizar la escuela inglesa, sin embargo, a los pocos meses, se marchó huyendo de la guerra civil que se desató.

1642

Regresó a Suecia para continuar con su plan de reforma.

1648

Trasladó su obra a Polonia, Holanda y Hungría, de donde eran originarios sus padres.

1658

Se publicó Orbis sensualium pictus, de ostensible repercusión. Se la considera la primera enciclopedia ilustrada para niños y contiene temas sobre ciencias sociales y naturales.

1659-1670

Desarrolló actividades para la Unión de los Hermanos Moravos, escribió libros de teología y de filosofía. Fijó su residencia en Países Bajos.

Se casó en tres oportunidades y tuvo un total de 4 hijos.

15/11/1670

Murió en la ciudad de Ámsterdam, Holanda, a los 78 años.


Escrito por Editorial para la Edición #111 de Enciclopedia Asigna, en 05/2022.