Se denomina analizar a la acción de comprender un determinado fenómeno hasta el momento desconocido. La acción de analizar comprende un tipo de proceder que descompone una situación concreta en una suma de sus elementos, de modo tal de poder dar cuenta de cómo estos se interrelacionan. EL análisis es un tipo de procedimiento que puede efectuarse en una cantidad enorme de circunstancias, pero que en algunas es especialmente útil y por ello suelen darse una serie de pautas al respecto. Así, por ejemplo, cualquier disciplina científica necesita del proceso de analizar distintas circunstancia y por ello utiliza una serie de pasos que le garantizan un grado relativo de éxito.
Durante tiempos inmemoriales los hombres se han preguntado sobre el funcionamiento de las cosas. Este tipo de inclinación dio lugar a la filosofía y luego a las distintas ciencias que en la actualidad conocemos. Con el propósito de llegar a un conocimiento fidedigno de los distintos fenómenos que se presentan, se necesita de un determinado proceso que garantice que estos puedan ser comprendidos. En esta perspectiva, cada ciencia tiene un determinado tipo de procedimiento o análisis que le resulta más apropiado. No obstante, todas ellas se encuadran en la actualidad en el método hipotético deductivo. El análisis, en general, debe llegar a las causas que generan los fenómenos. En efecto, cuando se considera una determinada circunstancia que se desea analizar, se pueden observar distintos elementos a considerar; no obstante, algunos se subordinan a otros. Un análisis correcto dará cuenta de cuáles son las causas y cuales los efectos en intentará reproducir una experimentación que corrobore esta evaluación.
La posibilidad de realizar un análisis certero se manifiesta de forma evidente en determinados trabajos en donde es necesario resolver problemas de forma rápida y eficiente. Así, por ejemplo, si una determinada circunstancia indeseable se suscita, es necesario conocer rápidamente su causa con la finalidad de eliminarla y restablecer una situación de orden. Pensemos por ejemplo en el caso de un paciente que recurre a un médico con la necesidad de ver resulta su enfermedad. El profesional deberá entender a través de los signos y los síntomas manifestados la causa que subyace a estos. Para ellos deberá realizar un determinado análisis de la situación, es decir, una recopilación de datos que pueden ser llevados a cabo por estudios. Con posterioridad, puede tomar alguna medida al respecto que de una pauta de la respuesta que tiene la enfermedad y así completar el análisis.