La gramática es el conocimiento que estudia las estructuras de una lengua. Uno de las formas de comprender una lengua es analizar cada tipo de palabras. En esta ocasión, se trata de comprender el significado del adjetivo en nuestro idioma.
Un adjetivo es un tipo de palabra cuya función principal es acompañar a un sustantivo. Una de sus características consiste en que se expresan incorporando las diferencias de género (masculino y femenino) y de número (singular y plural). Por otra parte, los adjetivos tienen que acompañar al sustantivo de manera concordante. Así, un sustantivo en singular solo puede presentarse con una adjetivo igualmente en singular.
Una de los rasgos de los adjetivos es la posibilidad de sustantivarse, es decir, pueden actuar como si fueran un sustantivo. Veámoslo con unos ejemplos: Esta postura me parece la mejor o De estos zapatos prefiero los negros. Tanto la palabra mejor como negros son adjetivos que en las dos oraciones actúan como sustantivos.
El adjetivo acompaña al sustantivo, aunque no necesariamente en un orden determinado. De hecho, se puede decir la arena blanca o la blanca arena. En el primer caso el adjetivo es un epíteto y sirve para aportar énfasis a la explicación.
Existen dos modalidades de adjetivos: los calificativos y los determinativos. Los primeros se utilizan para indicar una cualidad del sustantivo (un automóvil rápido o una niña simpática). Los determinativos se dividen en varias categorías: demostrativos, posesivos, numerales, indefinidos y relativos. Los demostrativos tienen la finalidad de comunicar algo en relación con la distancia (este, ese, aquel, esos, esas, aquellas o aquellas determinan el valor de cercanía de un sustantivo). Los posesivos indican, como su nombre indica, la pertenencia (mi, tu, su, nuestro, vuestro o suyo). Los numerales especifican una cantidad que indica un cierto número (dos, tres, mil, doble, triple o tercio). Los de tipo indefinido también expresan una cantidad, pero de manera imprecisa (bastantes, muchos, pocos, ciertos o varios). En cuanto a los adjetivos relativos son aquellos que proporcionan información sobre el grado que tiene un sustantivo (puede haber un grado comparativo, positivo, superlativo, comparativo de inferioridad y otros maneras de establecer un vínculo con el sustantivo).
Por último, otra de las peculiaridades de los adjetivos es la adjetivación de aquellas palabras que no son propiamente adjetivos pero pueden funcionar como tales. Por ejemplo, si digo hombre en bicicleta, joven con gafas o escultura en mármol, las palabras bicicleta, gafas y mármol son adjetivaciones de un sustantivo, ya que su función en estos casos es calificar algo y, por lo tanto, actúan como un adjetivo.