- 30/09/1959
- 1976
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- 2022
Nació en el municipio de Tegucigalpa.
Realizó sus estudios primarios y secundarios en escuelas religiosas.
Se graduó en la carrera de Administración de Empresas.
Administró las empresas familiares vinculadas a sectores económicos como el maderero y agrícola ganadero.
Se casó con el político y empresario Manuel Zelaya, con quien tuvo 4 hijos. De ellos, solamente su tocaya Xiomara Hortensia, más conocida como Pichu, es diputada del Congreso desde 2022, por el partido Libre. En 2019, la habían propuesto como candidata presidencial, pero su hija rechazó la propuesta.
Antes de recalar en la política desarrolló una intensa labor social y benéfica en diversas organizaciones.
Incursionó en la política de la mano de su esposo. En un comienzo lo asistió y acompañó en todo lo inherente a la gestión de sus campañas.
Asumió como presidenta del movimiento femenino del Partido Liberal cuando su marido fue elegido presidente de la Nación.
Dirigió la Junta Nacional de Bienestar mientras se desempeñó como primera dama.
Su esposo fue derrocado y enviado al exilio. Estaba descansando en la residencia oficial, cuando un grupo de militares irrumpió, lo levantó, le arrancó su investidura presidencial y lo obligó a marcharse al exilio. Fijó residencia en República Dominicana.
Las repercusiones internacionales no tardaron en llegar y la Asamblea General Extraordinaria de la Organización de los Estados Americanos (OEA) suspendió de inmediato el derecho de Honduras a participar del organismo, e instó al país a promover todas las acciones que fuesen necesarias para restaurar la democracia y restituir al presidente en su cargo.
Encabezó marchas de protestas, exigiendo la restitución de su esposo en el cargo.
Regresó a Honduras con su esposo tras un acuerdo de éste con el presidente Porfirio Lobo, una vez que ya no corría riesgo su integridad, ni la posibilidad que fuese detenido y juzgado.
Firmaron un acuerdo en la ciudad de Cartagena, en Colombia, y los presidentes de Colombia y Venezuela asumieron el rol de garantes y mediadores.
Cofundó con su esposo el partido Libre.
Se presentó como candidata a la presidencia y quedó en segundo lugar detrás de Juan Orlando Hernández
Fue candidata en un cargo símil al de vicepresidente y acompañó la candidatura de Salvador Nasralla de su partido, en las elecciones presidenciales que terminaron con la reelección de Hernández.
Ganó las elecciones presidenciales con una holgada diferencia respecto de su contrincante: 51,12 %, contra 36.93 %, de la candidata Nasry Asfura, perteneciente al Partido Nacional y candidata del gobierno liderado por Orlando Hernández, en ese momento.
Unos meses antes se había impuesto en las elecciones primarias del partido Libre, que la definieron como candidata oficial para competir por la presidencia.
Una cuestión relevante respecto de la elección es que logró un récord de participación ciudadana: votó el 70 % del padrón habilitado, algo que no había sucedido.
Asumió y juró como presidenta de Honduras, en un hecho inédito para la historia política del país que vio por primera vez a una mujer asumir dicho puesto.
Lo hizo en el marco de una celebración que incluyó la presencia de mandatarios de varias partes del mundo, entre ellos la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, quien se comprometió a ayudar y a asistir al país en su difícil contexto económico, político e incremento de la violencia.
Es la primera vez también que un partido de tendencia de izquierda gobierna el país.
Cabe destacarse que, el escenario político, social y económico que enfrentó la nueva mandataria no es sencillo ni mucho menos, porque el país está inmerso en un sinfín de graves problemáticas, tras 8 años consecutivos de un gobierno de tendencia conservadora, que estuvo cooptado por la corrupción y el autoritarismo.
Deberá lidiar con instituciones debilitadas, una justicia al servicio del gobierno de turno, la represión y castigos de las protestas sociales, entre otras.
Se comprometió a derogar aquellas leyes que avalen la impunidad y afecten los derechos humanos.
El presidente saliente fue detenido en Estados Unidos; está acusado por narcotráfico y corrupción, y se espera que sea extraditado a su país.
Para paliar la situación económica lanzó una serie de subsidios a la energía y los combustibles.