Uno de los conceptos más importantes de un gran número de religiones, la trinidad es aquella idea que nos habla de la existencia de una entidad tripartita que rige toda la existencia y desde donde parte toda la vida: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Esta noción es central y especialmente importante para las religiones cristianas, sobre todo para la católica, ya que las figuras principales de la religión se representan con esta idea.
¿Qué nos está transmitiendo esta noción religiosa?
De acuerdo a los dogmas cristianos, la Trinidad (también conocida como Santísima Trinidad) es la unión de los tres entes más importantes: el Padre o Dios, el Hijo o Jesucristo y el Espíritu Santo. Esta relación entre los tres es la que nos rige y nos da la vida.
En la historia del cristianismo, el momento en que nace Jesús es cuando se completa finalmente la unión de esta trinidad ya que es el Espíritu Santo el que anuncia su venida y así se hace presente el Padre o el Señor Nuestro Dios en la Tierra. La presencia del Hijo no sería otra cosa que la corporización en nuestra vida del Señor.
La construcción histórica de un concepto
Como ocurre en todas las religiones, los conceptos que conforman el dogma son creaciones culturales que se establecen para dar entidad a los ideales o valores religiosos. La Trinidad ocupa el mismo espacio, ya que como concepto no existió siempre sino que es una construcción histórica que se determinó en ciertos momentos de la historia de Occidente con el fin de darle fuerza y poder al dogma principal de la religión cristiana.
En diferentes concilios de la época medieval se fueron estableciendo así sus características, definiendo tanto el vínculo entre el Padre y el Hijo como también determinando la función y las características del Espíritu Santo.
La presencia de la trinidad en la vida cotidiana
Para comprender la importancia que este concepto lleva en nuestra vida cotidiana, debemos tener en cuenta que el mismo aparece en un sinfín de cosas. De hecho, el mismo se elige como nombre de ciudades, de lugares, de establecimientos, también obviamente en iglesias donde su presencia es permanente.
En el arte, al mismo tiempo, ha sido siempre un tema de mucho interés pudiéndose encontrar infinidad de obras de arte (pinturas, esculturas, literatura) donde se representa al conjunto de estas tres figuras y se permite abrir el juego a pensar cómo son, qué forma tienen y qué función cumplen.
Imagen: Fotolia. miro kovacevic