El sustantivo es una categoría gramatical que designa objetos, personas, animales, lugares o cualquier otra cosa existente (sea esta real o imaginaria) y se caracteriza por ser el núcleo de los sintagmas nominales dentro de la oración.
Clasificación de sustantivos y ejemplos
Concretos y abstractos: los sustantivos concretos designan objetos y seres tangibles que existen en la realidad o que se supone son reales como: mesa, casa, soldado, escuela, fantasma. Por otro lado, los sustantivos abstractos designan entidades inmateriales como sentimientos, conceptos, acciones, cualidades y demás, por ejemplo: amor, tiempo, observación, honestidad. Es posible que un mismo sustantivo sea concreto en un contexto y abstracto en otro dependiendo de la acepción o el sentido en el que se use dentro de la oración:
El decreto del rey se dio a conocer esta mañana. La palabra decreto, en este caso, es un sustantivo abstracto, puesto que el “decreto”, semejante a una ley, no es un objeto material.
Todos los colaboradores firmaron el decreto con tinta indeleble. La palabra decreto, en este caso, es un sustantivo concreto, puesto que hace referencia a un objeto material, un papel con cierto estipulado sobre el que se colocaron varias firmas.
Propios y comunes: cuando un sustantivo hace referencia a una entidad en particular que se distingue de otras dentro de una clase o grupo se le conoce como sustantivo propio. Suele tratarse del nombre o apellido de una persona, el nombre de un lugar, evento o institución y generalmente se escribe con mayúscula inicial, algunos ejemplos serían: Miguel de Cervantes, España, Congreso Internacional de Literatura u Organización Mundial de la Salud. En cambio, si el sustantivo representa a un grupo o clase de elementos entonces se trata de un sustantivo común como en gato, perro, salchichas, lámpara o abuela; todos ellos designan a un conjunto que comparte ciertas características como en el caso de «perro» (cuadrúpedo, canino, doméstico, etc.); mientras que, si hablamos de uno de esos perros en particular que se distingue de los otros, se trataría de un sustantivo propio: El perro del vecindario se llama Bingo.
Individuales y colectivos: los sustantivos individuales refieren a un solo objeto o ser (excepto en plural), mientras que los colectivos, según José Alberto López Díaz, son aquellos que «escribiéndose en singular, nombran un conjunto de la misma especie». Los ejemplos más comunes para este tipo de sustantivos son los que designan un conjunto de la misma especie, en especial animales como perro/ jauría, abeja/ enjambre, pez/banco, siendo los primeros sustantivos individuales y los segundos, colectivos. Una característica de los sustantivos colectivos es que al agregarles un adjetivo como pequeño o grande, se alterará la cantidad de elementos y no el tamaño de cada uno de estos, por ejemplo, un enorme perro hace referencia a un perro grande, mientras que una enorme jauría hace referencia a un número elevado de perros, no a perros grandes.
Simples y compuestos: los sustantivos simples son aquellos que poseen una sola base léxica (lexema o raíz); mientras que los sustantivos compuestos tienen dos o más, de forma simple podría decirse que son varias palabras juntas y estas pueden pertenecer a diferentes categorías gramaticales, por ejemplo: baloncesto (sustantivo + sustantivo), parabrisas (verbo + sustantivo), pelirrojo (sustantivo + adjetivo), sinsentido (preposición + sustantivo). Cabe resaltar que no es una simple unión de palabras, sino de lexemas, por lo que palabras como soldado no cuentan como sustantivos compuestos dado que el significado no tiene que ver ni con un sol ni con un dado.
Primitivos y derivados: cuando un sustantivo no procede de ningún otro dentro de la misma lengua se le llama primitivo, en cambio, si el sustantivo procede (o deriva, de ahí el nombre) de otra palabra se le llama derivado y podemos identificarlo debido a que incorpora prefijos y sufijos en su estructura. Ejemplos del primer tipo serían: pan, semilla espejo, prestigio; y sus posibles derivados serían: panadería, espejismo, semillero, desprestigio.
Características del sustantivo por género y número
Los sustantivos presentan variaciones morfológicas de género y número. De acuerdo con Hugo Duarte, los casos de género son los siguientes:
1) Cuando el femenino es una palabra diferente del masculino: padre/madre.
2) Cuando el masculino termina en -o, -e se cambia por -a: hijo/hija.
3) Cuando el masculino termina en consonante se agrega una -a: señor/señora.
4) Cuando el femenino presenta terminaciones -esa, -isa, -ina, -iz: rey/reina.
5) Cuando su forma no varía y solo se distinguen mediante el artículo: el/ la artista.
6) Cuando abarcan ambos géneros (epicenos): la ballena (macho y hembra), la criatura (niño o niña).
En cuanto a los morfemas de número, Duarte señala cuatro casos:
1) Se añade una -s: gato, gatos.
2) Se añade la sílaba -es: virtud, virtudes.
3) Sin modificación alguna, la misma forma para singular y plural: el/ los martes.
4) Sin forma singular: gafas (las gafas, no existe la gafa).
Referencias bibliográficas
Duarte Márquez, H. (2007). Morfosintaxis -de la oración al discurso. Puebla: Universidad Autónoma de Tlaxcala.López Díaz, J. A. (2021). Compendio de gramática española y apuntes sobre redacción. La Habana: Pueblo y Educación.