La perplejidad es la confusión en lo que respecta a un tema o cuestión específica. Es un tipo de experiencia común en lo que respecta al proceso de conocimiento humano, un proceso que tiene idas y vueltas en modo supino. En efecto, la perplejidad ocurre en buena medida cundo una determinada evaluación acerca de la realidad se ve refutada a de modo imprevisto por la experiencia. La perplejidad, por lo tanto, puede entenderse como un estado de incertidumbre en lo que respecta a nuestro conocimiento y a la realidad. Son muchos los ejemplos que pueden remitir a una experiencia de estas características en la historia, pero siempre tendrán como fundamento un desencaje entre lo creído y lo vivido.
El hombre, para tomar decisiones en el mundo debe tener un mapa mental de éste, una suerte de representación de la realidad circundante. De hecho, la ciencia y sus teorías son muestras de este tipo de situación, ideando continuamente modelos que luego la experiencia deberá validar o eliminar. No obstante, en la ciencia la posibilidad del falseo está contemplada de antemano por el método científico; en el caso de que un tipo de evento sea inesperado en función de nuestros conocimientos, la posibilidad de la perplejidad es alta.
Este tipo de consideraciones son extremadamente relevantes en disciplinas como las finanzas. En efecto, la gestión de riesgo continuamente se realiza dentro de determinados presupuestos, que si llegasen a verse puestos fuertemente en duda, generarían una situación de zozobra tanto individual como colectiva. Este tipo de fenómeno suele conocerse como “cisne negro”, un evento totalmente impredecible (en alusión al descubrimiento de estos ejemplares animales que se creían inexistentes debido a las experiencias del pasado, en donde los registros los excluían totalmente). Los “cisnes negros” son escenarios impredecibles y que fueron descartados de antemano por la mayoría de las personas, estaban fuera de los planes; este es el caldo de cultivo de una situación de perplejidad, en donde nuestras creencias son puestas fuertemente en duda, en donde nos damos cuenta que desconocemos el mecanismo que orienta la realidad.
Dado que la perplejidad es ante todo un tipo de respuesta frente a una actitud relacionada al conocimiento, es de entender que desde el tipo de vista científico se generen protocolos para proceder y establecer los límites de lo que sabemos. En este sentido, puede decirse que nuestros conocimientos en lo que respecta al universo, a pesar de haberse desarrollado enormemente, son extremadamente pequeños, circunstancia que debemos tener siempre presente.