Una junta es una organización instituida con la finalidad de gobernar un determinado territorio. La misma se compone de un número variado de individuos y suele ser provisional. Esta nomenclatura fue típica en distintas colonias de América Latina, extendiendo su nombre en algunos casos de actualidad. Así, en el caso de un gobierno de facto, también es frecuente el uso del término “junta”, sobre todo por el hecho e incluir a varios militares, cada uno representantes de distintas áreas (ejército, fuerza aérea, armada naval, etc.). En el caso de países democráticos, la expresión puede aludir a los cuerpos colegiados reunidos con la finalidad de gobernar empresas de capitales.
Una junta es un tipo de organización constituida por varios individuos que suelen ser representativos de alguna forma de poder. En el caso de América Latina, estas organizaciones fueron una de las primeras expresiones de gobierno en alcanzarse. En efecto, con motivo de las independencias de España, cada región fue organizando su propia forma de gobierno, la mayoría de ellas provisionales hasta tener una mejor estructura política. Este hecho se fundamenta en la circunstancia de que ya habían existido experiencias en este sentido en España y sentaron un precedente para las colonias que heredaron muchas de las tradiciones políticas de la madre patria.
En el caso de una junta militar, está en general se forma luego de un golpe de estado, como una forma de mantener unida a toda la estructura militar. Este tipo de experiencia también fue común en diversos países de América Latina durante la segunda mitad del siglo XX, circunstancia que todavía tiene sus heridas abiertas. Este tipo de expresiones fueron cayendo paulatinamente luego de que el descrédito que cosecharan aumentara significativamente en la población. En la actualidad todavía existen algunas experiencias de juntas militares en el mundo.
Por último, una junta puede ser el nombre que recibe un cuerpo que gobierna alguna institución u organismo privado. Así, por ejemplo, una sociedad anónima suele estar dirigida por un director general, pero su propiedad corresponde a los accionistas, individuos con derechos políticos y económicos sobre la empresa. Estos se reúnen con cierta periodicidad en una junta para determinar acciones de importancia en lo que respecta a la compañía, considerando los resultados de la misma con detenimiento. Fusiones, divisiones, adquisiciones o cualquier tipo de decisión de relevancia debe tener la aprobación de este cuerpo. Es por ello que debe ser llamada a sesionar con motivo de circunstancias de importancia.