El humano es el único ser vivo del planeta capaz de utilizar un lenguaje articulado que permita una comunicación compleja. Otros animales tienen sistemas de comunicación, pero ninguno de ellos es equiparable al lenguaje humano, al hecho de hablar. Así, el habla se presenta como algo excepcional en la naturaleza. Ante este dato inequívoco, cabe hacerse una pregunta: ¿ por qué somos capaces de hablar ? Desde muchas disciplinas se ha intentado ofrecer una respuesta definitiva. Las neurociencias o la paleontología aportan explicaciones parciales sobre el habla.
Hay un acuerdo general sobre cómo hemos llegado a hablar: a través de un proceso evolutivo. A lo largo del desarrollo de transformación que nos ha convertido en humanos ( en homo sapiens ) hubo un momento en el que empezamos a articular palabras, a explicar nuestro entorno mediante los distintos idiomas. Al parecer este momento de la evolución fue posible porque el cerebro se desarrolló de tal manera que pudimos comunicarnos. Además, morfológicamente nuestras cuerdas vocales, la mandíbula y la lengua podían coordinarse con la mente para emitir sonidos.
Los especialistas explican el habla a partir de un dato clave: el bipedismo. Los humanos nos pusimos de pie y esto supuso un cambio global en nuestra estructura física. Las manos podían funcionar como herramientas y la estructura craneal se modificó. De esta manera, el cerebro pudo crecer significativamente y esto condujo al hecho excepcional: el lenguaje.
El habla se puede estudiar desde varios puntos de vista. Los logopedas intentan corregir algunos defectos de la pronunciación. Los neurólogos estudian las afasias, es decir, las distintas lesiones cerebrales que pueden afectar al habla. Los lingüistas estudian los diferentes idiomas y sus estructuras. La oratoria es la disciplina que orienta sobre las técnicas necesarias para una correcta comunicación. Las academias de idiomas intentan que conozcamos otros idiomas distintos. Los traductores trasladan unas palabras a otras lenguas y así podemos comprender las ideas de los individuos de otras culturas. En definitiva, varias disciplinas se ocupan del fenómeno del habla desde su propia metodología y perspectiva.
Algo tan evidente como hablar y comunicarnos es uno de los grandes misterios de la humanidad. El lenguaje es el elemento singular de la raza humana y resulta casi imposible imaginar un mundo sin palabras. De hecho, todos los conocimientos tienen algo en común: son maneras distintas de decir algo, de hablar.
Hay algunas máquinas que ya pueden hablar. Es un logro de la inteligencia artificial,pero hasta la fecha ninguna ha podido superar nuestra capacidad de comunicarnos.