Muchos lo denominan el deporte más elegante de todos mientras otros le hacen críticas. Sin dudas, la equitación es un deporte único que bien vale la pena definir para conocer más sobre él y sus principales características.
Es evidente que la equitación no es un deporte popular como otros
Si partimos del hecho de que la posesión de un caballo ya implica cierto poder adquisitivo se hace evidente aquello que mencionamos. Históricamente, los sectores más poderosos de Europa hicieron del caballo una forma clara de demostrar su posición social y esto también se debió en gran parte a que este animal siempre acompañó a los grandes aristócratas y reyes en la batalla.
Desde tiempos inmemoriales que el ser humano tiene vínculos muy cercanos y profundos con el caballo, ya sea para utilizarlo como animal de carga, de guerra, de acompañamiento, de transporte, etc. Así, en diferentes épocas su doma se empezó a convertir en un arte que sólo unos pocos podían dominar. Se estima que el siglo XVIII es el momento de mayor desarrollo de esta disciplina ya que se transforma en un entretenimiento de los nobles europeos que complejizan más y más el cuidado del animal y las enseñanzas que se le imparten.
Un elemento central del deporte conocido como equitación es la combinación del trabajo humano con el trabajo equino
Para participar se necesita contar con un caballo entrenado y preparado para realizar las diferentes pruebas a cumplir. El caballo debe estar domado correctamente y además contar con un apropiado desempeño que es muy interesante visualmente ya que el animal realiza movimientos que aprende en el entrenamiento.
La equitación consiste en pasar diferentes pruebas que se basan en saltos tanto en alto como en largo sin cometer penalidades. Las estructuras que se ponen en el camino tienen varas que, al contacto con el animal, pueden caerse y hacer que el equipo pierda puntos. Los obstáculos también pueden incluir pozos de agua o estanques en los que el animal no debe caer o pisar. Todos estos saltos representan, de modo artificial, los saltos o ejercicios que el animal debe realizar correctamente cuando está al mando de su dueño en la naturaleza.
Críticas a la equitación: uso del animal y trato
Como suele ocurrir con todos los deportes o disciplinas que implican el uso de algún animal, la equitación recibe duras críticas desde sectores animalistas que desprecian la utilización del caballo, un animal noble y tranquilo, en un deporte de alta exigencia, expuesto a un público y con posibilidad de lesionarse. Además, se señala que para realizar las diferentes pruebas de las que consta el camino al animal se lo obliga a adaptar su cuerpo a esos movimientos cuando eso no es natural, incluyendo en muchas veces un entrenamiento tortuoso y duro para un animal que debería ser libre.
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