El vocablo dicotomía presenta varios significados. Por un lado, se refiere a la repartición o división de algo en dos mitades. Se usa en el contexto de la botánica como sinónimo de bifurcación. En el lenguaje filosófico es un método para clasificar ideas. Por último, en muchos planteamientos se presentan las falsas dicotomías.
Dos caminos posibles
Cuando nos encontramos ante dos opciones que se presentan con un valor aparentemente igual, estamos ante una dicotomía. En nuestro idioma se emplea este vocablo como sinónimo de dilema. Si alguien dice que tiene una dicotomía con respecto a una situación personal, sabemos que debe tomar una decisión sobre un asunto y que ante él tiene dos opciones posibles y debe elegir una de ellos.
En la botánica
Cada una de las ramas de una planta se puede dividir en dos mitades. Esta ramificación o bifurcación es conocida como dicotomía en el lenguaje de la botánica. Por lo tanto, se trata de un sistema de ramificación.
En el ámbito de la filosofía y la psicología
En el contexto de la filosofía es bastante habitual separar algún aspecto de la realidad en una división dicotómica. Así, el mundo sensible y el mundo inteligible son dos mundos distintos para Platón. Algo similar ocurre con otros pares de conceptos: empírico y racional, monismo y dualismo, ser y nada, doxa y episteme, materia y forma, etc.
Por otro lado, el pensamiento dicotómico es aquel en el que algo se presenta en forma de todo o nada, verdad o mentira. Este tipo de planteamientos solamente es admisible en situaciones muy concretas (por ejemplo, cuando realmente hay dos únicas alternativas), pero en la mayoría de circunstancias el pensamiento dicotómico supone una simplificación y una distorsión de la realidad.
Algunas personas tienen la tendencia a clasificar sus vivencias con un enfoque dicotómico. Estas personas consideran que las cosas son buenas o malas, pero no contemplan la existencia de un término medio.
Las llamadas falsas dicotomías o falsos dilemas
En ocasiones se presentan dos alternativas de tal forma que parece que solo se puede elegir una de ellas. Si alguien dice «o votas a un partido de derechas o a uno de izquierdas» está realizando una falsa dicotomía, ya que se están omitiendo otras alternativas posibles (un partido ecologista, un partido de centro, etc).
Se podría afirmar que una falsa dicotomía es una argumentación basada en la trampa.