El término compulsión se utiliza mayoritariamente en relación con el estudio de la conducta humana. De manera general, la compulsión es el deseo irrefrenable hacia algo. En otras palabras, se podría decir que es la obsesión por algo o su repetición excesiva. En el uso cotidiano del lenguaje se podrían realizar afirmaciones como las siguientes: «siente compulsión por el alcohol» o «su compulsión hacia el sexo le causa problemas sociales». Como es lógico, este tipo de conductas son anómalas y, en consecuencia, son estudiadas por la psicología.
La idea de la compulsión también se expresa con el término «conductas compulsivas» y normalmente se aplica a las adicciones tradicionales (al tabaco, al alcohol, al sexo o a la comida) o en relación con algunos trastornos mentales.
Trastorno obsesivo compulsivo
Cuando las manías se convierten en obsesiones descontroladas, quien las padece sufre por ello, ya que normalmente la obsesión por algo va acompañada de angustia y desasosiego. La persona que tiene un trastorno obsesivo compulsivo puede repetir una acción en un número desproporcionado (por ejemplo, lavarse las manos cincuenta veces en un día o tomar medidas extremas y de forma continuada para evitar la contaminación).
Los especialistas en este tipo de trastornos consideran que el rasgo común en la mayoría de casos es la repetición de una acción. Otro elemento característico es el hecho de realizar algo como si fuera un ritual. Quien padece este tipo de problemas no busca generalmente la obtención de un placer sino que su repetición pretende disminuir un malestar determinado. El trastorno obsesivo compulsivo o TOC se puede corregir con una adecuada terapia, así como con el uso de fármacos.
Compulsión en el psicoanálisis freudiano
El psicoanálisis es una corriente de la psicología que tiene su propia visión de la condición humana, de las estructuras mentales del individuo y de ciertos aspectos concretos de la naturaleza humana: el papel de la sexualidad o del inconsciente. El psicoanálisis aporta una concepción específica sobre la compulsión.
Desde el psicoanálisis como teoría se considera que el comportamiento compulsivo obedece a una idea: la consideración por parte del individuo con este trastorno de haber cometido un gran pecado o crimen. Para la mayoría de psicoanalistas la repetición obsesiva o el ritual injustificado es una manera inconsciente de autocastigarse por el crimen que cree haber cometido el neurótico obsesivo compulsivo.
Según el psicoanálisis los actos propios de la neurosis obsesiva en forma de compulsión suelen ser actos cotidianos que inconscientemente pretenden borrar un sentimiento de culpa. Ese sentimiento de culpa que intenta borrarse con la repetición va dirigido a la figura del padre, a quien se quiere «matar» porque el padre simboliza la imposición de las normas sociales y. al mismo tiempo, el rival que impide que el niño se relacione directamente con la madre.