Los complementos circunstanciales son aquellos que responden a una de las siguientes preguntas: dónde, cuándo, cómo, por qué, para qué, con qué y con quién, de modo que tienen la función de añadir mayor información en relación con la acción del verbo.
La sintaxis, como rama de la lingüística, estudia la forma en cómo se organizan los elementos que componen una oración; estos elementos pueden ser palabras individuales o grupos de ellas. Los conjuntos de palabras que poseen una función específica se denominan estructuras sintácticas. Dentro de estas, encontramos los complementos, que son introducidos o encabezados por preposiciones, es decir, cada vez que en una oración aparezca una preposición lo que siga después de ella será un complemento.
Como en la mayoría de los complementos, el núcleo de los circunstanciales es un sustantivo que debe estar acompañado por sus determinantes. Todos estos elementos en su conjunto forman un complemento circunstancial. Es importante aclarar que tanto el objeto directo como el indirecto son también complementos, pero los circunstanciales se distinguen por ser los únicos que responden a las preguntas señaladas arriba.
De acuerdo con la pregunta que respondan, los complementos serán de lugar, de tiempo, de modo, de causa, de finalidad, de instrumento y de compañía.
Complemento circunstancial de lugar
Responde a la pregunta “¿dónde?” en relación con la acción verbal.
Ejemplo: María comió un pastel en la cafetería de la escuela.
El complemento circunstancial de lugar es “en la cafetería de la escuela” pues responde a la pregunta: ¿dónde comió María un pastel? Es importante observar que la preposición que introduce el complemento es “en” que, muchas de las veces, hace referencia a lugar o posición.
Complemento circunstancial de tiempo
Responde a la pregunta “¿cuándo?” en relación con la acción verbal.
Ejemplo: El ensayo del coro terminará en media hora.
El complemento circunstancial de tiempo es “en media hora” pues está encabezada por la preposición “en” y responde a la pregunta: ¿cuándo terminará el ensayo del coro? Es importante notar que la preposición en, que tiene especificaciones de lugar, también puede añadir información temporal.
Complemento circunstancial de modo
Responde a la pregunta “¿cómo?” en relación con la acción verbal.
Ejemplo: Susana me besó como la primera vez.
El complemento circunstancial de modo es “como la primera vez” pues responde a la pregunta: ¿cómo me besó Susana?
Complemento circunstancial de causa
Responde a la pregunta “¿por qué?” en relación con la acción verbal.
Ejemplo: Me suspendieron de la escuela por culpa de mi mejor amigo.
El complemento circunstancial de causa es “por culpa de mi mejor amigo” pues está encabezado por la preposición “por” y responde a la pregunta: ¿por qué me suspendieron de la escuela? Debe tenerse cuidado de no confundir el complemento circunstancial de causa con la oración subordinada adverbial causal. Ambas responden a la pregunta “por qué”; sin embargo, mientras el circunstancial está encabezado por la preposición “por”, o una similar, la oración subordinada lo está por el nexo “porque”.
Ejemplo: Suspendieron el partido por el mal tiempo – circunstancial de tiempo.
Mo novia me dejó porque no la supe valorar – oración subordinada adverbial temporal.
Si se observa, después del nexo “porque” aparece otra oración “no la supe valorar” reconocida por el verbo conjugado. Esto no sucede en el primer ejemplo donde después de la preposición aparece una frase “el mal tiempo” pues no hay ningún verbo conjugado que indique la presencia de una oración.
Complemento circunstancial de finalidad
Responde a la pregunta “para qué” en relación con la acción verbal.
Ejemplo: Estudié mucho para aprobar mi examen final
El complemento circunstancial de finalidad es “para aprobar mi examen final” pues es introducido por la preposición “para” y responde a la pregunta: ¿para qué estudié? Al igual que en el caso anterior es posible confundir este circunstancial con la oración subordinada adverbial final. Ambas responden a la pregunta “¿para qué?”, sin embargo, la oración subordinada utiliza el nexo “para que” mientras que el circunstancial hace uso de una preposición.
Ejemplos:
Compré estas flores para decorar mi cuarto – circunstancial de finalidad
Vine para que podamos hablar – oración subordinada adverbial final
Después del nexo “para que” se introduce la oración subordinada que se puede identificar por el verbo conjugado “podamos hablar” (perífrasis verbal). Debe notarse, además, que en el caso de los circunstanciales aparecen los verbos “decorar” y “aprobar” respectivamente después de la preposición. Sin embargo, no está conjugado, por lo que no puede contarse como oración pues esta depende de la presencia de verbos conjugados.
Complemento circunstancial de instrumento
Responde a la pregunta “¿con qué?” en relación con la acción verbal.
Ejemplo: Carlos golpeó la pared con un martillo.
El complemento de instrumento es “con el martillo” pues está encabezado por la preposición “con” y responde a la pregunta: ¿con qué golpeó Carlos la pared?
Complemento circunstancial de compañía
Responde a la pregunta “¿con quién?” en relación con la acción verbal.
Ejemplo: Fui al cine con mis amigas.
El complemento circunstancial de compañía es “con mis amigas” pues lo introduce la preposición “con” y responde a la pregunta: ¿con quién fuiste al cine?
A pesar de que la preposición “con” se usa con más frecuencia en los complementos de instrumento y compañía, también puede dar cuenta de modo.
Ejemplo: Me besó con mucha pasión.
Si bien la pasión podría tomarse como un instrumento, realmente está significando la forma en cómo se hizo, por lo que se podría preguntar ¿Cómo te besó? A lo que se respondería “con mucha pasión”.
Referencias bibliográficas
Duarte Márquez, H. (2007). Morfosintaxis -de la oración al discurso. Puebla: Universidad Autónoma de Tlaxcala.López Díaz, J. A. (2021). Compendio de gramática española y apuntes sobre redacción. La Habana: Pueblo y Educación.