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Nació en Lanuvium, una antigua ciudad italiana perteneciente a la región de la Lacio. Hijo del emperador Marco Aurelio, un auténtico estadista, y de su esposa Faustina la menor, hija del emperador Antonino Pío. Perteneció a la Dinastía Antonina, que se inició en el año 96 con Nerva.
Su padre lo asoció al imperio, tras decidir que de sus trece hijos él sería el sucesor al trono. Tenía 15 años.
Hasta el año 180 reinó en asociación con su padre y fue soldado en la guerra contra los pueblos barbaros. Lo acompañó a todas las campañas militares porque Marco Aurelio quería que se entrenase en el campo de batalla.
Se casó con Brutia Crispina en una unión acordada por sus familias. Se separaron en el año 182. Ella fue acusada de adulterio y desterrada a la Isla de Capri.
Inmediatamente después, oficializó su vínculo amoroso con Marcia.
Murió su padre y quedó a cargo del poder absoluto.
Asumió el puesto con el nombre de César Marco Aurelio Cómodo Antonino Augusto.
Socavó de inmediato la tranquilidad y la estabilidad del imperio con sus excentricidades y deficientes políticas. Todos los logros obtenidos por su padre los hizo perder.
Se concentró en el entretenimiento y la diversión que le profirieron los circos. Se consideró un atleta identificado con el héroe griego Hércules.
Si bien su reinado gozó de una paz relativa porque a él no le interesó como a su padre atender en este tipo de asuntos, la política interior del imperio se volvió inestable. Cada decisión que tomó estaba orientada a satisfacer sus demandas.
Su personalismo fue tan grande que hasta rebautizó a la ciudad de Roma como Colonia Commodiana.
Inmediatamente, su liderazgo se cuestionó y fue objeto de varios complots para sacarlo del trono imperial.
Intentaron asesinarlo. Su hermana Lucila y algunos miembros del senado estuvieron detrás de dicho intento. Los sobrevivientes fueron exiliados o ejecutados.
Este estado de cosas agudizó su ciclotimia y persecución contra el senado, que lo odiaba y temía a la vez.
Mandó a matar gente para que le tuvieran miedo y lo respetasen.
Por otra parte, gozó de una enorme popularidad por su inclinación a la organización de juegos de circo y las peleas entre gladiadores. Incluso él mismo participó de ellas.
Poco a poco se fue desentendiendo de los asuntos políticos y militares que, los delegó a terceros, a los que eligió en base a favoritismos y no por sus cualidades.
Casi todos estos quisieron sacar ventaja de esta situación y terminaron siendo ejecutados por él cuando se enteró de las traiciones.
Una de las leyendas más populares alrededor de su vida es que en esa pasión por los juegos y la lucha, supo pelear con gladiadores desarmados, a los que por supuesto mató por placer.
Por otra parte, se lo considera un sádico y un perverso que disfrutó de maltratar a personas discapacitadas, de matar animales, celebrar orgías y torturar esclavos.
Todos estos excesos, que trascendieron al pueblo, fueron incrementando el descontento hacia su persona y suscitaron muchos complots en su contra que se propusieron una sola cosa: eliminarlo para sacarle todo el poder.
Fue asesinado por un esclavo romano liberado llamado Narciso. Se urdió una conjura en su contra y fue estrangulado por este luchador que se caracterizó por ser un gran atleta. Antes, su concubina Marcia, intentó envenenarlo, mezclando veneno en su bebida, pero no logró el cometido.
Los conspiradores contrataron a Narciso para que lo estrangulara mientras se bañaba.
Detrás de la conspiración estuvo parte del senado encabezado por el prefecto pretoriano Quinto Emilio Leto y su concubina Marcia quien fue la que le abrió la puerta de la habitación para que lo ataque.
Narciso y él se conocían porque lo había usado para entrenarse y para que lo preparase ante sus apariciones públicas en los juegos celebrados en el Coliseo Romano.
Una vez muerto, fue declarado enemigo público del imperio y su figura fue denostada, despreciada y removida de estatuas, registros públicos, etc.
Tenía 31 años cuando falleció y con él finalizó la dinastía de los Antoninos.
La situación política y financiera del imperio que dejó fue crítica,
Cabe destacarse que, el personaje que el actor Russell Crowe interpretó en la superproducción Gladiador estuvo inspirado en Narciso.