Las ciencias naturales son un conjunto de disciplinas científicas que se encargan del estudio del mundo natural, es decir, todo aquello que existe con independencia de la creación humana. Por esta razón, también se las conoce como ciencias de la naturaleza.
Objeto de estudio
A diferencia de las ciencias sociales, que estudian diferentes aspectos del ser humano, como su cultura, organización, historia y comportamiento, y de las ciencias formales, que estudian objetos abstractos como las matemáticas o la lógica, las ciencias naturales ponen el foco en los fenómenos y objetos que existen en el mundo natural, es decir, que no son creados por mentes y manos humanas. Como humanos, no podemos más que intentar generar teorías que intentan explicarlos y comprenderlos, o bien (o mal) intentar modificarlos.
Gracias a los conocimientos aportados por las ciencias naturales, hemos podido modificar nuestro ambiente a nuestro favor, para que sea un lugar más cómodo para vivir (aunque a veces en detrimento del ambiente). Se incluye el estudio de objetos y fenómenos tanto macroscópicos como microscópicos, que ocurren tanto en la Tierra como fuera de ella, en el espacio exterior. Dada esta descripción, se puede intuir la infinita diversidad de objetos de estudio y posibles abordajes.
Ramas de las ciencias naturales
Dado que el mundo natural es muy diverso, las ciencias naturales se han ido especializando con el correr del tiempo, dando origen a diferentes ramas que acotan de alguna manera el objeto de estudio de cada una. A su vez, estas ramas pueden subdividirse en disciplinas aún más específicas. Entre las principales ramas podemos mencionar:
– Ciencias biológicas: Se trata de un conjunto diverso de disciplinas que estudian el mundo viviente, es decir todos los organismos vivos que habitan la Tierra, incluidos los aspectos anatómicos y fisiológicos del ser humano. Las ciencias biológicas incluyen a la biología molecular, zoología, botánica, fisiología, histología, anatomía, ecología, evolución, entre otras.
– Ciencias de la atmósfera: Se encarga del estudio del comportamiento de la atmósfera, es decir, del componente de aire de la biósfera. Esto incluye a los fenómenos climáticos y sus alteraciones. Los especialistas en esta materia se conocen como meteorólogos y meteorólogas.
– Ciencias físicas: El objeto de estudio de las ciencias físicas son la materia, el movimiento y la energía, sus comportamientos y modificaciones. Los especialistas en esta materia se conocen como físicos y físicas. Dentro de estas ciencias puede incluirse la astronomía, que estudia los fenómenos que ocurren en el espacio exterior.
– Ciencias geológicas: Se encarga del estudio de la superficie y el subsuelo de la Tierra, es decir, del componente terrestre de la biósfera. Los especialistas en esta materia se conocen como geólogos y geólogas.
– Ciencias químicas: El principal objeto de estudio de las ciencias químicas es la materia; su composición, sus propiedades, sus interacciones, sus comportamientos y modificaciones. Este grupo de ciencias incluye a la química orgánica, química inorgánica, química analítica, química biológica, entre otras ramas. Los especialistas en esta materia se conocen como químicos y químicas.
– Paleontología: Los paleontólogos y paleontólogas se encargan del estudio de los seres extintos, y aportan sus conocimientos para comprender la historia de la vida en nuestro planeta.
– Oceanografía: Se encarga del estudio los océanos, es decir, del componente acuático de la biósfera (más específicamente de los mares). Los especialistas en esta materia se conocen como oceanógrafos y oceanógrafas.
Muchas de estas ciencias se relacionan y complementan en sus saberes, como así también los hacen sus objetos de estudio.
Importancia de las ciencias naturales
Los conocimientos aportados por las ciencias naturales son claves para el desarrollo de la humanidad.
Por ejemplo, el conocimiento aportado por las ciencias geológicas y de la oceanografía, permite el aprovechamiento de los recursos naturales de la tierra y los mares para producir los insumos que consumimos diariamente.
Por su parte, los aportes de las ciencias de la atmósfera tienen un alto impacto en todas las actividades humanas, como son el manejo de los cultivos que dependen de cuestiones climáticas, como así también de todas las actividades influidas por las condiciones del tiempo.
Por citar más ejemplos, podemos decir que los conocimientos aportados por las ciencias biológicas tienen una importancia crucial en la salud, ya que alimentan los conocimientos utilizados en medicina, como así también en el aprovechamiento de recursos naturales que involucran otros seres vivos para el consumo a diferentes niveles.
Las ciencias químicas también aportan sus conocimientos en medicina, ya que sus principios permiten la creación de los fármacos que utilizamos para tratar diferentes enfermedades, entre otras aplicaciones. También contribuyen a la producción de productos industriales, alimentos, etc.
Por su parte, los conocimientos aportados por las ciencias físicas nos permiten comprender ciertos fenómenos que dieron lugar a grandes invenciones de la humanidad, como los automóviles, la electricidad, los aviones, etc. Y la lista sería interminable.
En resumen, los conocimientos aportados por las ciencias naturales permiten, entre otras cosas, dar solución a problemas concretos para el ser humano, sin mencionar la importancia per se que tiene el conocimiento del mundo en el que habitamos.