El budismo consiste en un conjunto de creencias surgidas en la India en el siglo V a.C. El mismo no acepta la existencia de un dios absoluto, sino que persigue el despertar espiritual individual por medios de prácticas y consejos extendidos por su fundador: Buda.
En la actualidad constituye la religión no teísta más influyente del mundo ya que abarca a un 7% de la población mundial, extendiéndose fundamentalmente en el continente asiático. Los países en que la mayoría de la población es budista son Tailandia, Camboya, Birmania, Singapur, Corea del Sur, China, Japón, Laos, Bután, Mongolia, Taiwán, Sri Lanka y Vietnam.
Origen
Establecer el origen exacto del budismo es complejo ya que no se ha conservado la información suficiente debido a que los primeros budistas transmitieron sus creencias de forma oral. En principio, los primeros registros escritos de una fe budista datan de alrededor del 300 a.C. en el territorio que constituye la actual India, período en el que el emperador Ashoka adoptó el budismo y lo convirtió en la fe oficial del imperio Maurya. Aquellos registros antiguos describen el surgimiento del budismo.
Según las fuentes, Buda habría nacido en el siglo V a.C. como el Príncipe Siddhartha Gautama en Lumbini, actual Nepal. Al provenir de una familia aristocrática, su padre (un poderoso gobernante), lo crio en una vida repleta de lujos con el fin de evitarle cualquier tristeza. De esta forma, el niño creció sin conocer el sufrimiento. No obstante, a sus 29 años de edad Siddhartha tuvo cuatro encuentros que cambiaron su vida. Por un lado, los encuentros con un anciano, un enfermo y un cadáver lo condujeron a la reflexión respecto de que la vejez, la enfermedad y la muerte son inevitables en la vida. Por otro lado, se encontró con un anciano religioso que vivía en la pobreza debido a que había renunciado a todos los lujos materiales con el fin de alcanzar la paz espiritual.
Producto de los cuatro encuentros, Siddhartha abandonó el palacio y se instaló en un bosque para abocarse al ascetismo extremo. Sin embargo, luego de siete años, comprendió que el camino para alcanzar la serenidad de espíritu debía ser el intermedio: sin lujos extremos y sin renuncias extremas. Ese momento, le valió su cambio de nombre a Buda que quiere decir “hombre despierto”. Los años siguientes continuó predicando hasta el día de su muerte.
Creencias
Si bien el budismo no cree en la existencia de un dios absoluto, se diferencia del ateísmo porque cree en la reencarnación y en la existencia del alma. En este sentido, el budismo considera que las personas reencarnan constantemente y que cada uno cumple con su karma, es decir que, la forma en que se actúa en la vida material provoca consecuencias en la próxima reencarnación.
Así, según el budismo, la existencia material posee tres características: la transitoriedad, la insustancialidad y el sufrimiento. Sobre esta afirmación se basan las cuatro nobles verdades que constituyen el eje del budismo. Estas son: primero, el dolor y la tristeza son inevitables; segundo, el origen del sufrimiento se encuentra en el deseo; tercero, el sufrimiento se puede eliminar si se elimina su causa; y último, existe una forma de eliminar la causa y es siguiendo el noble camino.
En ese sentido, el noble camino refiere a una serie de consejos que están relacionados con la sabiduría, con vivir una vida ética y con examinar la propia vida a través de la meditación. El mismo está representado por la rueda del dharma y su fin último consiste en alcanzar el nirvana, es decir, superar el sufrimiento, alcanzar el estado de liberación y romper con la rueda de reencarnaciones.
Características
En primer lugar, el budismo es un sistema de creencias no teístas, es decir, que no cree en la existencia de un dios creador. De esta forma, Buda habría sido ni más ni menos que un guía espiritual cuya propuesta consistió en favorecer la conexión del espíritu con el universo sin necesidad de acudir a fenómenos extraordinarios.
En segundo lugar, respecto de su organización, el budismo no cuenta con órdenes jerárquicos en su interior, ya que la principal autoridad está representada por las escrituras. No obstante, existen monasterios en los que habitan guías espirituales que ayudan a cumplir con el noble camino. Así, son los monjes budistas los encargados de preservar y enseñar la fe.
Finalmente, es una religión pacífica que no busca implantarse de forma violenta. De hecho, se opone a la conversión forzada y respeta la multiplicidad de puntos de vista respecto de los textos sagrados. Eso lo diferencia de las tres principales religiones a nivel mundial (el judaísmo, el cristianismo y el islam) las cuales, en distintos momentos de la historia, han extendido la guerra santa.
Referencias bibliográficas
Landaw, J., Bodian, S. y Buhnemann, G. (2011), “Buddhism for Dummies”, USA: Wiley.Autora
Escrito por Mercedes Roch para la Edición #120 de Enciclopedia Asigna, en 01/2023. Mercedes es Profesora y Licenciada en Historia, egresada de la Universidad de Buenos Aires, Argentina. Maestranda en Estudios Culturales Latinoamericanos. Autora de Primeras (Editorial Malisia).