- 19/01/1798
- 1814-1816
- 1818
- 1824
- 1825
- 1826
- 1842
- 1844
- Ley de los tres estados
- 05/09/1857
Nació en la ciudad francesa de Montpellier, Francia. Su padre fue funcionario de gobierno y su madre ama de casa, una mujer aquejada por la hipocondría. Su nombre completo es Isidore Marie Auguste Xavier Comte. Tuvo dos hermanos.
Fue un estudiante precoz, muy activo, híper memorioso y sobresaliente. En varias oportunidades recibió la distinción: “le prix de preéminence”.
Estudió en la Escuela Politécnica de París, sin embargo, no logró culminar su formación allí porque fue expulsado de la institución luego de ser parte de una revuelta estudiantil.
No se graduó en ninguna carrera universitaria, hecho que complicó más adelante su trayectoria como docente.
Asumió como secretario de Henri de Saint-Simón, autor, intelectual, teórico y creador del socialismo francés.
De él tomó la inspiración para luchar por la instalación de una organización social encabezada por hombres sabios, porque ello le reportaría beneficios inmediatos a todos los integrantes de la sociedad; mientras que consideró que la mejor organización social debía estar sustentada por la industria.
Dejó el trabajo con Saint-Simón, porque consideró que éste no tomaba en cuenta sus propuestas e ideas. Tiempo después cuestionó gran parte de sus enseñanzas y hasta lo llegó calificar de manipulador.
Se casó con Caroline Massin, con quien estuvo unido hasta 1842.
La pareja sufrió penurias económicas, entonces, él decidió trabajar como docente de la materia filosofía positiva.
Organizó un curso especial, compuesto por 72 lecciones, que permitió aprenderla velozmente.
Por la recarga y la presión laboral que se autoimpuso, se enfermó. Dormía poco y padeció crisis nerviosas.
Abrió un curso y debió cerrarlo ante la falta de respuesta. Culpó a su esposa por la falta de apoyo familiar y se separaron. Ella lo abandonó.
Solo, sin su esposa, los episodios de cólera aumentaron y se asentó en Saint-Denis, en búsqueda de una mayor tranquilidad.
Los médicos tratantes lo diagnosticaron como un maníaco megalómano y le recetaron que se recluya, duchas frías y otros tratamientos típicos de la época para tratar su afección psíquica.
Cayó en una profunda depresión, y ya, fuera de la órbita médica, se arrojó al río Sena desde el Puente de las Artes. Un guardia lo salvó de morir ahogado.
Publicó la obra Curso de filosofía positiva.
Retomó su trabajo y terminó de escribir el sistema de política positiva, que volcó en 2.500 páginas y le tomó tres años de realización.
Se conoció su obra: Discurso sobre el espíritu positivo
Propuso un estudio del proceso político a partir del esbozo de una ley que llamó de los tres estados, y que rige el devenir de la humanidad.
Cada rama del conocimiento debe atravesar por tres estados teoréticos diferentes: teológico o ficticio; metafísico o abstracto; y científico o positivo.
En el teológico se manifiestan las nociones del derecho divino que ostentan los reyes; el metafísico engloba concepciones como el contrato social; mientras que el estadio positivo implica el análisis científico o sociológico (un concepto que se lo debemos enteramente a él) de la organización política.
Su propuesta y anhelo fue una sociedad gobernada por una minoría de científicos y expertos que emplee metodología científica para llevar a cabo su acción de gobierno y resolver la problemática humana que se suscite.
Por otra parte, la armonía social se lograría haciendo publicidad de una “nueva religión” que se caracterizó por hacer a un lado el culto al dios personal e imponer un ser superior abstracto, que sería encarnado por el género humano.
Murió en la ciudad de París. Por decisión propia, antes de su muerte, fue enterrado cuando su cuerpo entró en estado de descomposición, con su mano derecha tocando su corazón, que oprimió un medallón con cabello de su último y más tórrido amor: Clotilde.