La asesoría es un servicio que consiste en bridar información a una persona real o jurídica. Médiate la misma se busca dar un respaldo en un tema que se conoce con gran detalle, respaldo que tiene una contrapartida en el hecho de garantizar un manejo eficiente de una situación determinada. Hoy en día existen asesorías de una gran cantidad de temas, como por ejemplo temas jurídicos, temas informáticos, temas económicos, temas científicos, etc. En cualquier caso, lo que se busca es una gran capacidad en el manejo de un tema que por diversas circunstancias es considerado de gran relevancia y trascendencia.
Para ser asesor en un área específica, es necesario poseer conocimientos sólidos en un tema que sea muy demandado y en lo posible con poca oferta dentro del mercado. En efecto, dado que existen situaciones muy específicas en donde un asesor puede contratarse, las mismas suelen coincidir con áreas en las que el conocimiento es crítico, en donde existen pocas personas que pueden tenerlo. El asesor sería en este caso un integrante del denominado sector cuaternario, el sector de servicios basados en un conocimiento de alto valor agregado, de alto grado de especialización.
Un ámbito en donde los asesores suelen pulular es en el de la política. En efecto, los políticos son continuamente interpelados por los medios masivos de comunicación o por el propio electorado en una gran variedad de temas, temas que es imposible conocer con exactitud en la mayoría de los casos. Es debido a esta circunstancia que los políticos tienen la inclinación a contratar asesores que les garantizan respaldo en algunos temas que son los que más suelen tocarse. Así, podemos contar dentro de estos asesores a los asesores económicos, a los asesores en materia de seguridad, a los asesores en el ámbito de las leyes, etc.
No obstante, es posible ver casos de asesoría también en el ámbito privado. Por ejemplo, en ocasiones las empresas deben incursionar en áreas que son nuevas o con poco desarrollo hasta el momento. En estos casos, suelen contratar a un asesor, es decir, a una persona con experiencia en la materia, para cubrir estos baches de información y proponer soluciones o planes de acción. Esta situación se plantea cuando las empresas carecen de personal en su interior como para desempeñar las tareas referidas. El asesor en este caso se contrata por un período limitado de tempo y resuelve los problemas planteados en el mismo. Cabe señalarse, no obstante, que estos servicios suelen ser bastante onerosos.