Las actividades políticas y militares en nuestra cultura han estado asociadas a los hombres, y por caso, a las mujeres les costó sangre, sudor y lágrimas, por ponerlo en términos bien populares, el hecho de imponerse en estos campos. Pero siempre ha habido excepciones a la regla y justamente ha sido ese romper con el molde lo que catapultó a la fama a la reina persa Artemisia I de Caria hace más de quince siglos atrás.
Halicarnaso fue una ciudad de relevancia en la antigua Grecia en la cual Artemisia ejerció un poder y un liderazgo notable. Cabe destacarse que su reinado estaba alineado con el poderoso Imperio persa de aqueménida. Incluso fue una gran aliada y sostenedora del poder del Gran Rey Jerjes I, del mencionado imperio.
En materia político militar, Artemisia, demostró su total afinidad y alineación con la política de Jerjes I al haber luchado en persona contra las polis griegas a instancias de la Segunda Guerra Médica. Esto obviamente le valdría la total admiración, respeto y apoyo de Jerjes I. Es decir, ambos gobernantes se sostuvieron y apoyaron, fueron grandes aliados.
El rol militar de Artemisia quedó absolutamente expuesto como dijimos ya en el enfrentamiento que el imperio aqueménida mantuvo con los griegos. Incluso, ella misma peleo en el frente y estuvo al frente de varias embarcaciones que seguían las directivas del propio Jerjes I.
Es ciertamente destacable que en aquellos tiempos una mujer lograse ese respeto por parte de los hombres y ni hablar del hecho de desplegar un rol tan activo en una posición que aún hoy sigue siendo reservada a los hombres. Por ello la figura de Artemisia no podía no pasar a la posteridad con tales acciones.
Existen pocas precisiones sobre su vida personal, solamente que nació y murió durante el siglo V A.C.
Recientemente, la gran pantalla ha desarrollado la historia de Artemisia en la cinta 300: Rise of an Empire. La actriz Eva Green se puso en la piel de Artemisia I.