La agilidad es una cualidad física o intelectual en relación con la manera de realizar una acción. Quien tiene esta condición es considerado como ágil.
Desde un punto de vista físico, un animal o un individuo tiene agilidad corporal cuando sus movimientos son flexibles y rápidos. Hay animales que en condiciones normales son por naturaleza ágiles (el chimpancé, el guepardo o la serpiente). Su agilidad es un elemento esencial en su adaptación al medio ambiente en el que viven. Se podría decir que esta característica les permite ser eficaces desde el punto de vista evolutivo.
El ser humano suele tener agilidad cuando es todavía joven, ya que esta cualidad se va perdiendo con el paso del tiempo. Sin embargo, con el ejercicio físico y un entrenamiento específico es posible mantener el cuerpo ágil. En este sentido hay ciertas actividades, juegos o deportes que requieren de una considerable agilidad: el baile, la gimnasia deportiva, el salto de trampolín, etc.
Los individuos o los animales tienen agilidad cuando hay un elevado control del propio cuerpo, es decir, cuando se manifiestan ciertas características: aceleración, control de la posición, fluidez en los movimientos, cambios de dirección y, en definitiva, un dominio general a la hora de ejecutar una acción o un desplazamiento.
El concepto de agilidad es aplicable igualmente al plano intelectual. De hecho, si alguien tiene rapidez mental en un sentido matemático, es resolutivo a la hora de responder a ciertos problemas y desde el punto de vista del lenguaje es igualmente eficaz, se dice que es una persona con agilidad mental. Esta característica puede ser natural o adquirida. Hay individuos que sin ninguna preparación concreta tienen una destreza mental relevante. De todas formas, la agilidad intelectual es normalmente algo que mejora con la repetición y la práctica.
Así como a los niños se les educa para que física e intelectualmente sean ágiles, las personas mayores necesitan igualmente entrenar la agilidad globalmente. En los casos donde hay un deterioro cognitivo significativo asociado a la edad, los médicos especialistas recomiendan una serie de ejercicios de agilidad mental para frenar el desarrollo del proceso degenerativo.
La idea de agilidad no solo tiene un sentido físico o intelectual, ya que puede emplearse este concepto de manera figurada (espero que mi empresa gane en agilidad).