Thomas Paine fue un héroe de los Estados Unidos, considerado de ese modo por haber contribuido con su accionar en la fundación de ese estado, incluso integra el selecto grupo que la historia ha dado en llamar como Padres Fundadores de los Estados Unidos.
Revolucionario y escritor inglés que desarrolló un rol clave en la independencia de los Estados Unidos
Fue un exponente de la Ilustración, luchando contra el racismo, la esclavitud, el sexismo, el racismo y la monarquía, y proponiendo en su lugar la república.
Paine había nacido en Norfolk, Inglaterra, un 29 de enero del año 1737, pero en el año 1774 decidió emigrar a las colonias que su patria natal tenía en América del Norte para participar de la Guerra por la Independencia de los Estados Unidos.
Tuvo un origen humilde que no le permitió acceder a una educación formal sino que la suya fue más bien autodidacta pero nada de ello melló contra la formación del intelectual impecable que supo ser.
Aporte en la Guerra de la independencia de Estados Unidos
En ese conflicto bélico se enfrentaron las 13 colonias contra Gran Bretaña, entre los años 1775 y 1783.
La historia terminó con el triunfo de los rebeldes y con la firma de un tratado.
Una de las consecuencias más sobresalientes de esta contienda y de la victoria de los emancipados fue la construcción del primer sistema político liberal y democrático que justamente incorporaba las ideas revolucionarias que ante todo y por sobre todo promovían la libertad y la igualdad.
En 1776 se declara la independencia y en 1787 entra en vigencia la constitución de la nación de la cual muchos estados se inspirarían más tarde.
Uno de sus más recordados aportes ha sido el Common Sense, un ensayo que conmovió a los ciudadanos y que se publicó en 1776 en plena revolución.
Básicamente, Paine, presentó a través del mismo un argumento sólido contra la dominación británica ya que en algunos la independencia provocaba ciertos temores.
Su gran expertise intelectual y de escritor le permitió lograr un escrito fácil de comprender y de asimilar por el público.
Allí era contundente al respecto del mensaje que quería sembrar: que las colonias no obtenían réditos sino que eran explotadas por la metrópoli de manera vil.
Pronto el Common Sense se volvió un éxito.
En 1789 decide asentarse en Francia, justamente en el momento álgido de la Revolución que por supuesto apoyó.
Disgustado por la llegada de Napoleón al poder, que por supuesto traía consigo toda una impronta autoritaria que se oponía a sus ideales, decide regresar a Estados Unidos.
Fallece en Nueva York en 1809.