En la República Italiana el cargo de Presidente equivale al de jefe del estado y es quien tiene como tal la responsabilidad de encarnar la unidad nacional sin que pesen en su desempeño las tendencias políticas.
Elegido por el Parlamento, y con una duración de siete años, en la actualidad el cargo presidente de Italia es ejercido por el jurista Sergio Mattarella, quien lo asumió el 31 de enero de 2015
Este veterano de la política y el derecho italiano es oriundo de Palermo, donde nació un 23 de julio de 1941, y a lo largo de su vida profesional ha desempeñado importantes cargos como ser: ministro de educación, vicepresidente del consejo de ministros, ministro de defensa, y juez de la corte italiana.
Mattarella vivió la política desde pequeño ya que su padre Bernardo fue un reconocido antifascista que fuera perseguido por el régimen de Mussolini y también fundador del partido Democracia Cristiana.
Se graduó en la carrera de derecho y en los primeros años de la década del ochenta del siglo pasado empezó a incursionar en política, por la facción de izquierda del partido fundado por su padre.
Desde que asumió como presidente ya pasaron dos primeros ministros: Paolo Renzi y Paolo Gentiloni, y el 1 de junio de 2018 asumió Giuseppe Conte, en el marco de una alianza entre el Movimiento 5 Estrellas y La Liga Norte.
El rol de Mattarella fue crucial a la hora de lograr formar finalmente el gobierno en Italia que desde el pasado marzo estaba acéfalo ante la imposibilidad de lograr un acuerdo tras los comicios; también se espera que el trabajo de Mattarrella sea bastante intenso en la política italiana que vendrá como consecuencia de las inquietudes que surgieron tras la asunción de Conte, en el marco de un gobierno compuesto por una mezcla de ideas populistas, xenófobas, antisistema y antieuropeas
Una primera intervención ya la hizo y fue exitosa por lo menos para que no cundierá más pánico en Europa, al vetar al ministro de economía del nuevo gobierno, Paolo Savona, un reconocido anti euro.
También, seguramente, deberá intervenir para aclarar las dudas que ya inundan al mundo político como consecuencia que es la primera vez que en Italia asume un gobierno con tendencia populista y xenófoba.
Matteo Salvini, líder de la Liga Norte que asumió como vicepresidente del gobierno junto a la cabeza del Movimiento 5 Estrllas, Luigi Di Maio, gestionará el ministerio del interior, y ya anunció su dura postura frente a la inmigración ilegal, mientras que Di Maio hará lo propio en las carteras de trabajo y desarrollo económico, en el marco de un ideario anti euro.