Con casi tres millones de discos vendidos, con casi treinta años de carrera artística ininterrumpida, con trece álbumes editados, más premios y reconocimientos internacionales que exceden las fronteras de su patria, Sergio Dalma, sin dudas, es al día de la fecha uno de los cantantes españoles más importantes y populares de su país y también del resto de las plazas de hispanoamérica en las cuales también ha sabido descollar con su talento musical e impronta única.
Nació como Josep Sergi Capdevila i Querol, el 28 de septiembre del año 1964, aunque claro, todos lo conocemos como simplemente Sergio Dalma, el seudónimo que escogió para transitar la actividad musical y que resultó de la unión de su segundo nombre más el nombre del pueblo natal de su padre.
Desde muy joven y al descubrir su interés por la música, Dalma, comenzó a despuntar el vicio y así es que participó en diferentes orquestas a las que prestó su voz en fiestas y presentaciones especiales.
A la par de sus primeras incursiones musicales, Dalma, desarrollaría una frondosa y destacada carrera como locutor de jingles publicitarios, convirtiéndose en uno de los locutores más requeridos de Barcelona durante la década del ochenta, y ni hablar del acercamiento íntimo a músicos y productores que tal tarea le procuró.
Otras dos cuestiones que sumaron a su reconocimiento en sus inicios fueron su presentación en el concurso Gent d’aquí, un programa de la televisión de Cataluña y sus actuaciones en la Sala Shadows de Barcelona.
Y sería justamente en este lugar en el cual captaría la atención de un productor que lo llevaría directo a la edición de su primer álbum: Esa chica es mía.
El éxito fue rotundo e inmediato, y canciones como ser: Soy Tremendo, Te quiero mamá y Castigado por pensar en ti, lo convirtieron en el nuevo ídolo musical de su país y de varias partes de Latinoamérica, tal es el caso de México, en donde se convirtió en un número uno.
Su gran popularidad fue la causa que en el año 1991 fuese elegido como el representante español para el Festival de la Canción de Eurovisión.
Si bien no ganó la competencia interpretando el tema Bailar pegados, su fama y alcance aumentaron a niveles fantásticos.
Ese mismo año llegaría su segundo álbum: Sintiendo la piel , en el cual tendría un lugar especial la canción Bailar pegados.
Le siguieron: Adivina, Solo para ti, Cuerpo a cuerpo, Historias normales, Nueva vida, De otro color, Todo lo que quieres, A buena hora, Trece, Vía Dalma y Vía Dalma II.
En todos los discos mantuvo no solamente la fenomenal popularidad construida sino que además, cada uno, siguió abultando su lista de hits (No despertaré, Naufragos, No me digas que no, Nueva vida, Déjame olvidarte, entre otros) y demostrando su permeabilidad a las nuevas apuestas, lo demuestran el disco De otro color, en el cual canta en catalán o Vía Dalma y Vía Dalma II, en los cuales interpreta populares canciones italianas de las décadas del setenta y ochenta.