Si bien carga en sus espaldas con una larga trayectoria empresarial en su país su popularidad y reconocimiento mundial se deben al hecho de ser el presidente de River Plate, uno de los equipos más populares de Argentina junto a su clásico rival Boca Juniors.
Nacido en la localidad bonaerense de Ramos Mejía, en 1947, se formó en la Facultad de Economía de la Universidad de Buenos Aires.
El ámbito de los seguros ha sido la base de su actividad profesional privada y la que le reportó reconocimiento en el mundo empresario local
Es el presidente de la compañía de seguros de retiro La Estrella y el propietario de una cadena de locales de sushi y de una compañía de medicina laboral.
En su caso, la familia, influyó en su pasión por el fútbol y en su posterior incursión como dirigente deportivo, ya que su padre fue interventor de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), entre 1971 y 1973.
Su pasión por River Plate, y por sacarlo de una situación apremiante en materia económica y futbolística, a la cual lo condujeron sucesivas y malas gestiones como la de Daniel Passarella y José María Aguilar, lo acercaron a la política del club
En 2005 se convirtió en la cara de la oposición del presidente Aguilar y luego le disputó la presidencia en 2009 a Passarella, pero sin resultados.
La caída del equipo a la categoría de la B Nacional, durante la gestión de Passarella, fue una hecatombe para el club y para el hincha y ello le abrió el camino para ser el favorito en las próximas elecciones de 2013 que ganó cómodamente
En 2017 fue reelegido por una abrumadora mayoría.
En 2018, con River finalista de la Copa Libertadores junto a su clásico rival Boca Juniors, protagonizó un hecho histórico e inédito pero también una sonada polémica con su par y presidente del club Xeneize, Daniel Angelici, en el marco del partido de vuelta que debía jugarse en el estadio Monumental y que fue postergado como consecuencia de un salvaje ataque perpetrado por los barras bravas de River contra el micro en el que viajaban los jugadores de Boca, a pocas cuadras del estadio
Si bien se solidarizó con el rival y presionó junto a Boca para que la confederación organizadora del torneo, CONMEBOL, postergue el partido para la siguiente jornada (25 de noviembre de 2018), a pocas horas de tener que disputarse el partido y de sufrir el mismo una nueva postergación porque Boca presentó un reclamo ante el tribunal de disciplina contra River, encabezó una dura polémica con Angelici a quien acusó de traición por haber firmado un pacto y luego hacer un pedido para que descalifiquen a su equipo y le den el juego por ganado a Boca.
Ante las acusaciones, negó que el club tuviese alguna responsabilidad en el ataque ya que el mismo se dio fuera del estadio y en zona que debía estar custodiada por el operativo de seguridad montado por las autoridades policiales de la ciudad de Buenos Aires
Muchos sospechan que las entradas incautadas unos días previos a un jefe de la barra de River que incluso terminó detenido por ese hecho, y que habrían salido del club, fueron el desencadenante de la furia de los hinchas que terminaron apedreando el micro boquense.