Se denomina PIB potencial al nivel más alto de la producción de un país que se mantiene durante un largo lapso de tiempo. Esta escala de posicionamiento se logra con factores agregados al desempeño, siendo la tecnología uno de los más determinantes. Conforme se adicionan elementos tecnológicos la productividad, se transforma en algo eficiente, disminuyendo costos y logrando altos beneficios, además, se puede cubrir el nivel de la demanda bajo este supuesto para tener una actividad de mercado saludable. Todos estos factores se ven reflejados en la estabilidad económica, ya que la inversión se vuelve atractiva y el empleo junto con los salarios en una completa armonía.
Otros recursos claves para llegar al PIB potencial, son la mano de obra capacitada, la capitalización enfocada al rendimiento e inversión dirigida al perfeccionamiento, por mencionar algunos, tomando como base la disminución de costos y buscando de manera recurrente que el estimado sea siempre positivo; hay que considerar que este momento en la producción nacional se encuentra establecido por los niveles de la inflación, la cual debe estar siempre equilibrada a la producción; otro rasgo a considerar es la tasa de desempleo, siendo esta una variable que modifica todas la referencias al crecimiento económico, como el ahorro y el poder adquisitivo. En el ideal del PIB potencial el empleo se aprovecha al máximo.
Brecha de producción (outgap)
Es la diferencia entre el PIB real al PIB potencial, también conocido por su término en ingles outgap. Esta medida permite conocer la tendencia de la producción, si es que se están aprovechando todos los recursos necesarios en diferentes lapsos de tiempo. Conocer este dato requiere aplicar una fórmula en la que resultado se presenta en porcentaje:
Brecha de producción = PIB real – PIB potencial
PIB potencial
Si es negativo significa que la economía está un proceso de ociosidad y que no se están aprovechando al máximo los medios para alcanzar la producción más elevada a la que se puede llegar; en este punto debe siempre existir un empleo en plenitud. La brecha de producción se conforma de un conjunto de ciclos, en donde cambia, el primer nivel es siempre positivo y creciente, con lo que se llega a una segunda fase donde sigue siendo positiva pero ahora decrece. En el tercer nivel la brecha se vuelve negativa, pero ahora tiene a crecer, llegando a un nivel en el que es negativa y decreciente al mismo tiempo. Estos ciclos aparecen por los constantes movimientos en el PIB real. En este punto es donde se utilizan políticas que influyan a llegar al punto de potencialidad al que se puede llegar dadas las circunstancias económicas.
Para obtener el PIB potencial se usan diferentes técnicas estadísticas o modelos matemáticos conocidos como econometría, con lo que se puede llegar a un estimado gracias a la integración de diferentes variables que influyen en el crecimiento de la producción. Una forma es tomar los niveles de la población económica activa con la medición de la producción, loq que arroja también un estimado; con la variación de la inflación también se puede tener un acercamiento a este dato.
La importancia del PIB potencial
Una vez que se tiene un dato que represente el PIB potencial, se pueden crear las políticas pertinentes para establecer: si la potencia productiva está por debajo del nivel esperado es posible que el empleo tenga caídas nulas e inclusive con tendencia a la baja, si el resultado es por arriba, es necesario que se planee una política con restricciones, ya que la inflación tendrá modificaciones que afectan el poder adquisitivo. La simetría a considerar para una economía sana se da con la relación entre dos variables claves que son la producción y los precios.
La producción se puede llegar a ver deteriorada por la falta de inversión, en especial con respecto a la tecnología. Se debe considerar que la competitividad se ha vuelto parte fundamental en la estabilidad económica global, donde el comercio internacional es ahora la esencia de la producción, por lo que no existe nada mejor que explotar al máximo.