Estamos acostumbrados a conocer las cosas desde un punto de vista particular, es decir, desde un enfoque concreto y las cosas nos resultan diferentes si se encuentran sometidas a circunstancias distintas. Dicho con otras palabras, entendemos las cosas a partir de un sistema de referencia o un marco de referencia.
Una de las primeras ideas de cualquier marco de referencia de lo que nos rodea en el espacio es que el movimiento es algo relativo, es decir, siempre hay algo que se mueve con respecto a otra cosa que permanece sin movimiento. Para conocer la posición de un objeto en movimiento tendremos que situarlo dentro de un sistema de coordenadas, el cual actuará como marco de referencia espacial. Esta idea no es sólo aplicable al movimiento físico, sino que es extrapolable a cualquier ámbito de la realidad. Pensemos en una situación cotidiana, un joven que está estudiando en la universidad. Su marco de referencia está definido por unas serie de ideas: las materias que estudia, su proyecto académico y personal y todo lo relacionado con sus circunstancias. El conjunto de aspectos del estudiante se presentan como sus coordenadas. Sólo a través de ellas se pueden explicar sus acciones.
Un marco de referencia es un modelo explicativo ( también se denomina paradigma ). Durante muchos siglos, el ser humano estaba convencido de que la tierra era inmóvil y que el resto de planetas giraba alrededor de nuestro planeta. Cualquier explicación o fenómeno se encontraba dentro de este marco de referencia o paradigma y cuando surgió una nueva explicación ( la teoría heliocéntrica de Copérnico ) la ciencia tuvo que construir otro modelo, otro marco de referencia.
Nuestras ideas, creencias y valores se encuentran de manera inevitable en un contexto social e histórico, el cual actúa como marco de referencia y resulta muy difícil situarse al margen del mismo. Vale la pena ilustrar esta idea con un ejemplo histórico. En 1968 un saltador de altura, Dick Fosbury, incorporó una técnica de salto novedosa, saltar de espaldas. Hasta entonces, la técnica utilizada ere otra muy distinta: saltar sobre el listón dando un giro sobre el vientre ( el rodillo ventral ). La aportación de Fosbury supuso un nuevo marco de referencia para los saltadores, que en pocos años incorporaron un nuevo estilo, el Fosbury flop.
Podríamos describir el concepto de marco de referencia como las reglas de juego de una actividad; científica, deportiva, política o de cualquier índole. Las reglas de juego son las coordenadas que enmarcan una realidad y, en principio, son aceptadas porque son consideradas normales.