La República Romana está considerada como el período de la historia de la Antigua Roma en la cual se le puso punto final a la Monarquía Romana expulsándose a su último rey e instaurándose a la República como nueva forma de gobierno.
Esta etapa política se extendió entre el año 509 A.C. y el año 27 A.C., tiempo en el cual se impondría otra forma de gobierno, la autocrática y que por supuesto impondría una nueva etapa en la sociedad romana.
En tanto, Lucio Junio Bruto, ha sido señalado como el hombre responsable de la república en la época indicada.
Respecto de su vida y orígenes no existen demasiadas certezas sino más bien todo lo contrario, sin embargo, lo que se sabe es que presentaba un origen patricio y que era el hijo de una de las hermanas del rey de aquel tiempo, Lucio Tarquinio el Soberbio, quien por tanto sería el último rey de Roma.
El oráculo de Delfos, el recinto sagrado en el que se veneraba al dios Apolo, le había anticipado a Lucio Junio Bruto que él sería el próximo mandamás de la ciudad romana y entonces, todas sus acciones y actividades se orientaron a lograrlo.
Aún más, casi paga con su propia vida el sinfín de conspiraciones que procuró, aunque, su enorme habilidad lo habría salvado cuando se hizo pasar por loco.
A esta situación se le sumaba que el rey Lucio Tarquinio el Soberbio se manejaba de un modo ciertamente arbitrario y era cada vez más evidente su intención de neutralizar al Senado, el organismo a partir del cual la clase aristócrata se profesaba en Roma en aquel tiempo.
Y la gota que rebasó el vaso fue que uno de sus hijos atacó el honor de una mujer patricia que terminó suicidándose.
Todo este estado de cosas fue usado hábilmente por Lucio Junio Bruto para levantar a la población y alzarse contra Tarquino El Soberbio.
Una vez que el rey Tarquino El Soberbio estuvo fuera del poder, Junio Bruto, estableció un Senado que funcionaría de modo permanente y nombró dos magistrados que tendrían a su cargo la ejecución de las decisiones del Senado y por supuesto, uno de ellos fue el mismísimo Lucio Junio Bruto.
El primer tiempo de la República se caracterizó por su inestabilidad y los enfrentamientos provocados por los partidarios del expulsado rey.
En el mismo año de su instauración, 509 A.C., en uno de los enfrentamientos, moriría el propio Lucio Junio Bruto que no podría ver con sus propios ojos la evolución de su propuesta.
De todos modos, la misma sobrevivió ampliamente a su creador, como dijimos, hasta el año 27 A.C.