Cuando los políticos o monarcas se salen del protocolo y la formalidad que naturalmente revisten sus cargos es inevitable que no sean noticia por ello…
Desde que la selección croata de fútbol arrancó en junio de 2018 su histórica performance mundialista en Rusia tuvo que compartir el protagonismo en los medios del mundo con la presidenta del país que captó la atención de la opinión pública al mostrarse en los partidos enfervorizada, cual hincha común y corriente
Su imagen, vistiendo los colores de la selección, saludando, y alentando efusivamente al equipo en el vestuario, tras el pase a semifinales, recorrió el mundo.
Otras acciones comentadísimas fueron: su decisión de descontar de su salario los días en los que se encontró en Rusia viendo a la selección y haber pagado de su bolsillo los viajes al mundial usando aerolíneas comerciales
Desde febrero de 2015 ocupa el cargo de jefa de estado, siendo la primera mujer en lograrlo.
Nació en la ciudad de Rijeka, que perteneció a la ex Yugoslavia, el 29 de abril del año 1968.
Estudió en su país y en Estados Unidos, se graduó en la carrera de Relaciones Exteriores, y obtuvo licenciaturas en literatura, inglés, y en español
En los años noventa realizó su incursión en política, en el partido de centroderecha Unión Democrática Croata.
En el nuevo milenio comenzó su carrera en la función pública, específicamente en el área de relaciones exteriores, donde aglutinó una enorme experiencia que la llevó a ocupar diversos cargos de relevancia en esta: subsecretaria general de diplomacia pública para la OTAN, embajadora de Croacia en Estados Unidos, ministra de asuntos exteriores y europeos de Croacia, y ministra de asuntos europeos de Croacia
Pero no se haría mundialmente reconocida por ninguna iniciativa en este plano en el que sin duda es una experta, sino que lo hizo por su faceta de hincha acérrima del fútbol y de su selección.
También recorrieron el mundo sus imágenes entregándole la camiseta de la selección de Croacia a colegas como Donald Trump y Theresa May, en la cumbre de la OTAN, celebrada en julio de 2018, coincidiendo con el desarrollo del mundial de Rusia.
En 2015, tras ganar el ballotage, se convirtió en la presidenta croata.
Si bien es conservadora, católica, y se opone al casamiento entre homosexuales, su gestión aprobó una ley que le da a las parejas gays los mismos derechos y obligaciones que a una pareja heterosexual, y se declaró a favor del aborto.
Y como todo presidente no escapa a las polémicas, siendo en su caso la relación que mantuvo con el empresario futbolístico Zdravko Mamic, acusado de efectuar negocios fraudulentos con transferencias millonarias de jugadores.
Esta casada y tiene dos hijos, de los cuales la mujer es patinadora profesional y campeona juvenil de su país.