Fue uno de los más grandes estudiosos y expertos del idioma castellano del siglo XX.
Editó varios diccionarios de lengua castellana en los cuales sistematizó su sapiencia y el exhaustivo estudio que realizó sobre esta y otras lenguas anteriores como el latín vulgar y las consecuentes lenguas romances
La filología y etimología actual le debe muchísimo a este absoluto referente de los idiomas castellano y catalán.
Oriundo de la ciudad de Barcelona en la cual nació en 1905, también realizó sonadas contribuciones al catalán, idioma originario de la comunidad de Cataluña, y que defendió a capa y espada, incluso por esa defensa e identificación con dicha lengua es que se negó a integrarse a la Real Academia de Lengua Española.
Perteneció a una familia de ilustres, su padre fue diputado en las cortes por Barcelona, su madre profesora y pedagoga de reconocida trayectoria, su hermano un notable matemático, y su hermana una psicoanalista que también se destacó.
Interesado por la lingüística desde temprana edad se anotó en la carrera de Filosofía y Letras de la Universidad de Barcelona y también se formó en otras casa de estudios europeas.
Durante la dictadura de Primo Rivera debió exiliarse a razón del fuerte cuestionamiento que realizó a la misma.
También fue un acérrimo crítico de la figura autoritaria de Franco.
Durante su exilio dictó una cátedra en la prestigiosa Universidad de Chicago, y en Argentina también dejó su huella a través de la creación del Instituto de Lingüística de la Universidad de Cuyo en Mendoza
En la década del cincuenta regresó a España.
Entre sus obras destacan varios diccionarios que con el tiempo se convirtieron en referencias fundamentales del idioma castellano, tal es el caso del Diccionario crítico etimológico castellano e hispánico, que actualizó otros trabajos anteriores como el diccionario crítico etimológico de lengua castellana y el Breve diccionario de la misma lengua
En ellos ofrece un profundo conocimiento sobre las lenguas romances, que se reconocen como una evolución del latín vulgar.
Brinda detalles sobre el origen del vocabulario castellano de antaño y el actual y realiza vinculaciones con las lenguas romances con las que está estrechamente emparentado
Aunque fue reacio a los reconocimientos, fue imposible no distinguirlo con varios, como el Premio Nacional de las Letras españolas en 1989, y el Premio de honor de las letras catalanas en 1984, un premio ciertamente sentido por ese amor que profesó siempre por la lengua de su pueblo.
Falleció en el municipio catalán de Pineda de mar en 1997, a los 91 años.