El ámbito jurídico italiano no fue el mismo nunca más luego de los aportes que realizó y que lo erigieron en uno de los máximos exponentes del derecho en su patria.
Colaboró en la realización del primer código penal, por lo cual sus teorías sobre la criminalidad fueron contenidas en él y en el que se redactó tiempo después, desplegó una larga trayectoria como profesor de Derecho Penal, y fue una de las voces más contundentes contra la pena de muerte en su tiempo
Nació en la ciudad de Lucca, en la Toscana, en el año 1805.
Se graduó y doctoró en la carrera de leyes y prontamente comenzó a dedicarse a la enseñanza de los derechos comercial y penal.
Se lo considera uno de los tantos adherentes que ha tenido la escuela clásica del derecho penal
Otros de los grandes esfuerzos profesionales que efectuó fue la anulación de la pena de muerte y la aceptación de la idea que debe existir la proporcionalidad entre delito y condena, o sea, que el castigo que se le impone a una persona por haber cometido tal o cual delito debe estar en estricta relación a la magnitud de este.
Escribió varias obras siendo la más notable, Programa de Derecho Criminal, la cual compendia su tarea como docente, e incluso se utilizó como material de lectura obligatoria para los alumnos de la carrera de derecho en la Universidad de Pisa
En la mencionada publicación realizó una síntesis de los que a su juicio profesional deberían ser los deberes inexcusables a cumplir por parte de un abogado defensor: conocer profundamente el hecho y el derecho para asistir lo mejor posible a su defendido; empatizar con él; coraje para no abandonar la defensa a pesar de los riesgos y obstáculos que se presenten; cumplir con el secreto profesional y preservar la verdad que le haya manifestado su defendido; desplegar la actividad del mismo modo y con la misma entrega, ya sea se defienda a un rico o a un pobre; y la fidelidad a los principios en todo cuanto se efectúe en la labor.
Una declaración de principios que por supuesto tuvo la misión de enaltecer la tarea profesional de los abogados defensores.
También se desempeñó como diputado del Parlamento Italiano, siendo elegido para el puesto en tres oportunidades: 1863, 1865 y 1867, y en 1876 fue designado como senador
Fue uno de los que adhirió a la iniciativa de la unión italiana y por ello es por lo que estuvo de acuerdo con la anexión del ducado de Lucca a Toscana.
En sus últimos años de vida estuvo severamente afectado por la ceguera por lo cual tuvo que abandonar su trabajo como docente.
Falleció en Lucca, en el año 1888.