El cuerpo es la parte física y material, en el caso del ser humano y los animales; aunque también podemos definir con el término “cuerpo” a todo objeto físico y material.
Este último concepto es muy utilizado en ciencias como la química o la física, donde cuerpo es, en definitiva, cualquier objeto.
Pero vamos entonces a ocuparnos del cuerpo humano, del cual podemos abordar diferentes cuestiones. Por ejemplo, el cuerpo humano adulto posee un total de 206 huesos, pero cuando nacemos, tenemos un total de 366. ¿Perdemos huesos? No, lo que sucede es que durante el desarrollo desde la niñez a la adultez, que conforma todo el proceso de crecimiento, algunos huesos, en especial aquellos que se encuentran en la parte de la cabeza, se fusionan entre sí.
El cuerpo del ser humano está compuesto en tres grandes partes: la cabeza, el tronco (divido a su vez en abdomen y en tórax) y las extremidades superiores (brazos) e inferiores (piernas).
El cuerpo está formado por sistemas, que se componen a su vez de órganos, los cuales están formados por tejidos, y éstos últimos se conforman a través de células, que se subdividen en moléculas. En relación a las células, nuestro cuerpo tiene más de cincuenta billones de ellas. Como decíamos estas células forman los tejidos que luego conforman los órganos de los deferentes aparatos o sistemas (son ocho en total): respiratorio, excretor, endocrino, digestivo, locomotor (músculos y huesos), circulatorio, reproductor y nervioso.
El otro concepto al que referimos es al de cuerpo como cualquier objeto físico o material, acepción utilizada con frecuencia en la física o la química. En el caso de la física, un cuerpo puede ser objeto de experimentos, a partir de la utilización de algunos instrumentos físicos: por ejemplo, se puede medir la velocidad, su trayectoria, el peso, la masa, la posición el espacio, etc.
El cuerpo físico ha sido descripto en teorías tanto de la mecánica clásica como de la mecánica cuántica. Dentro de la física clásica, un cuerpo es un cuerpo que posee masa y además energía, que es tridimensional (posee tres dimensiones en relación al espacio), tiene orientación y trayectoria dentro de un espacio determinado y su existencia se prolonga a través del tiempo pero durante una determinada cantidad de tiempo. Por ejemplo, un automóvil es un cuerpo, pero que a su vez está compuesto por diferentes materias, que lo forman como un todo, como un cuerpo específico y determinado.