Tal vez dejada de lado en la actualidad frente a otros soportes, más tecnológicos, la biblioteca tanto privada como pública es y ha sido históricamente un elemento fundamental de la cultura de una sociedad así como también de la identidad de un individuo.
Cuando hablamos de una biblioteca hacemos referencia al lugar donde se disponen libros. Como el término en castellano se aplica tanto al mueble que contiene a esos libros y que puede ubicarse en una casa, como al lugar público donde los particulares pueden acercarse a leer o a consultar material escrito, a veces se presta a confusiones. De cualquier modo, hablamos de un producto puramente cultural y necesario.
¿Qué es una biblioteca?
La biblioteca es, en otras palabras, el lugar donde se almacenan libros y todo tipo de material escrito. Más allá de su acepción, una biblioteca es un compendio y un conjunto de libros que pueden o no estar clasificados y categorizados, así como también dispuestos de diversas formas según el interés o necesidad de quien los posea. Mientras por mucho tiempo la posesión de complejas y completas bibliotecas personales fue un rasgo de distinción y de cultura, hoy en día la biblioteca en si misma en el espacio privado de una casa u hogar ha perdido mucho lugar frente a otros soportes como los tecnológicos que permiten que la persona pueda almacenar en un solo aparato miles de libros, además de poder encontrarse en ellos todo la información necesaria que pueden contener muchos libros.
Es por esto que la biblioteca como símbolo cultural ha perdido fuerza, aunque a veces muchos la defienden con más fuerza ante los avances del mundo tecnológico.
La biblioteca pública: la democratización del conocimiento
Desde el momento en que los Estados y algunos particulares comenzaron a organizar conjuntos de materiales escritos para que los mismos puedan ser consultados por el público en general comenzó a crecer con fuerza la idea de la biblioteca como espacio de democratización del conocimiento y de la cultura.
La biblioteca pública actuó por mucho tiempo como un ámbito donde las personas de más distinto tipo se juntaban a consultar material de cualquier origen, tema o extensión. Una biblioteca puede ser más grande o menos grande, pero por lo general siempre respeta la característica de tener que tener el material organizado y clasificado de modo que se pueda saber exactamente qué se tiene y cómo encontrarlo.
Las bibliotecas de barrio y su importancia como elemento socializador
Además de ser espacios de aprendizaje y consulta, las bibliotecas de barrio, usualmente pequeñas y con material aportado por los mismos socios, se han convertido en lugares donde muchas personas se han sabido juntar para debatir diferentes problemáticas, la realidad misma y otras cuestiones en un ámbito de divulgación del conocimiento y ahí su importancia para conectar ideas, personas y grupos sociales.