Cuando la tenista rusa Anna Kournikova pisó por primera vez un court de tenis a mediados de la década del noventa del siglo pasado no era tan habitual que las tenistas destacasen por su belleza física más que por su drive o bolea, si bien Anna disponía de un concreto y evidente talento deportivo, también era imposible ignorar esa fantástica belleza y sensualidad que desplegaba cada vez que su delgada, perfecta y rubia figura aparecían en la cancha…
Kournikova es oriunda de Moscú, Rusia, donde nació el 7 de junio del año 1981.
Dadas sus condiciones naturales para el tenis, cuando tenía nada más que nueve años se trasladó al estado norteamericano de la Florida para asistir a la academia de tenis de Nick Bollettieri, que algo sabía ya de producir estrellas del tenis con Mónica Seles y André Agassi entre sus más notables alumnos.
Para el año 1995, Anna, de catorce años, ya ostentaba prestigio en las categorías juveniles.
Al año siguiente, en 1996, debuta como profesional en las grandes ligas del tenis, en uno de los torneos más importantes y codiciados como es el Abierto de los Estados Unidos.
Aunque no ganó el torneo sí se hizo notar al llegar hasta la cuarta ronda, en la cual una grandiosa Steffi Graf la dejaría afuera.
El año que siguió, 1997, también fue de crecimiento porque se pudo posicionar entre las jugadoras del circuito más importantes y asimismo alcanzó las semifinales de otro importante torneo como es el de Wimbledon, en tierras inglesas y la final de Lipton.
Pero como bien indicáramos al comienzo la belleza de Kournikova no pudo mantenerse al margen de su carrera profesional sino muy por el contrario terminó por captar más protagonismo que su derecha y su revés, ya que de inmediato comenzó a ser convocada para ser la cara de diversas y notables marcas que sí o sí querían a esa bella y sensual rubia promocionando sus productos y servicios.
Tal cuestión obviamente incidiría negativamente sobre su rendimiento y Kournikova se alejaría de los courts
Y la otra razón externa al deporte por la cual la fama de Anna creció a límites insospechados es por su relación sentimental con el cantautor español e hijo de Julio Iglesias, Enrique Iglesias.
La relación entre ambos comenzó en el año 2002 y ya lleva largos años.
Todo un logro por cierto en la farándula.