Ojeda desplegó un rol clave y fundamental en la conquista española de América.
Acompañó en el que fuera su segundo viaje al conquistador por excelencia de estas tierras, Cristóbal Colón, aunque, Ojeda, cobraría protagonismo per se por ser el descubridor de Venezuela y de la costa colombiana, por fundar Santa Cruz y por desplegar el rol de gobernador de Urabá, una de las primeras administraciones públicas de aquel tiempo.
Ojeda nació en el poblado conocido como Torrejoncillo del Rey, perteneciente al estado de Cuenca, cuando corría el año 1468, en el seno de una familia perteneciente a la nobleza aunque venida a menos en materia de economía.
Tal inestabilidad económica de su familia lo llevó a desempeñarse al servicio de Don Luis de la Cerda.
Muchos indican que mientras se desempeñaba como tal entró en contacto con Colón.
También participó de la toma Granada donde se destacaría como un valiente y eficaz soldado.
En el año 1493 es designado al mando de una de las naves en el marco del segundo viaje de Colón a América.
Entre sus primeros logros se destaca la obtención de muestras de oro en la región de Cibao, las cuales serían enviadas prontamente a los reyes para dar cuenta de las cuantiosas riquezas que disponía el flamante continente descubierto y también, Ojeda, impondría su autoridad frente a varios caciques a los que doblegaría.
En el año 1498 y tras distanciarse de Colón, Ojeda, deja la Española y regresa a su patria.
Lo primero que hace al llegar es mantener una entrevista con su protector, el obispo Juan Rodríguez de Fonseca quien lo autorizaría a realizar el primer viaje de expedición sin la presencia de Colón.
El viaje lo hizo en una sola carabela y acompañado de Américo Vespucio y Juan de la Cosa.
Desde su salida y hasta la llegada a la isla de Trinidad recorrió el mismo derrotero que Colón, pero a partir de aquí empezaría su propio descubrimiento, la costa de Venezuela, Maracaibo, la península de Guajira, llamada por los indios como Coquibacoa.
Todo este recorrido sería plasmado en un mapa, en el año 1500, por el cosmógrafo que lo acompañó, Juan de la Cosa.
En tanto en 1501 es nombrado gobernador de Coquibacoa.
Pero el ánimo descubridor y conquistador no cesarían hasta el último día de su vida y planearía más expediciones que por ejemplo lo llevarían a fundar Santa Cruz, la primera población fundada por españoles en el continente americano.
Tras sortear complicaciones con sus socios que lo llevarían a la cárcel, la junta de Burgos resuelve la división de la tierra en dos gobiernos, siendo el de Urabá, la actual costa de Colombia, el que compete a Ojeda.
Pero los problemas no terminarían sino que empeorarían como consecuencia de la hostilidad y la resistencia de los indios y también por la escasez de víveres y las enfermedades contraídas.
Todo este estado de cosas lo llevó a renunciar al cargo de gobernador y los últimos años de su vida los transcurrió retirado de la actividad y en Santo Domingo.
En 1515 fallece.