Los agentes naturales son elementos presentes en la naturaleza y que son necesarios en alguna medida para la vida del hombre. Algunos ejemplos al respecto lo constituyen en agua, el sol, los vegetales, etc. En este sentido cabe distinguirlos de otro tipo de elementos presentes también en la naturaleza pero que pueden afectar a la vida del hombre negativamente. Los agentes naturales son tenidos muy en cuenta últimamente en virtud de un movimiento que busca utilizar a estos elementos para conseguir una mejor calidad de vida, dejando de lado la utilización de productos que surgen de una industria masiva; este movimiento puede entenderse como una revalorización de agentes con los que el hombre tenía un mayor contacto en el pasado.
En la actualidad, la sociedad mantiene un ritmo de vida y de consumo que en ocasiones se vuelve en contra de la misma. En efecto, es posible encontrar una gran cantidad de enfermedades ligadas al intenso ajetreo que existe en el trabajo, como asimismo derivadas por una mala alimentación. Esta circunstancia parece paradójica si consideramos que existe una gran cantidad de recursos económicos que podrían hacer que la vida sea mucho más saludable. Es por esta circunstancia que en la actualidad han surgido distintos movimientos que buscan volver a un tipo de vida más natural, un tipo de vida que deje de lado comportamientos específicos y productos con un alto grado de procesamiento.
Un ejemplo de lo antedicho lo establece la denominada medicina natural. Con la misma se pretende dejar de lado muchos remedios y tratamiento s provenientes de la medicina tradicional, reemplazándolos por productos extraídos de vegetales o con un cambio en la actividad que se lleve a cabo. La medicina natural ha ganado muchos adeptos con el paso del tiempo y sin lugar a dudas lo seguirá haciendo pese a los resquemores que despierta. La razón de esta abrupta valoración tiene que ver con las limitaciones que en algunos casos parecen mostrar las variantes tradicionales.
A pesar de las opiniones encontradas que siempre existirán en cualquier aspecto relacionado con la salud, lo cierto es que en las últimas décadas han aparecido expresiones preocupantes de enfermedades que antes eran inexistentes o al menos eran inexistentes en algunas etapas de la vida. Así, por ejemplo, es posible observar obesidad en niños y problemas de corazón en personas que todavía se encuentran en su juventud. Todas estas circunstancias nos hacen plantearnos que elementos de consumo están afectando negativamente a nuestra vida, productos que cabría reemplazar por tradicionales agentes naturales.